Hay un viejo chascarrillo según el cual si la extensa nómina de escritores de éxito originarios de esta tierra hubiera tenido su cuna en Barcelona habría sido llamada ‘la escuela catalana’; en cambio, como nacieron en León, se le apodó ‘la mafia leonesa’. Más allá de la retranca, lo cierto es que el término alcanzó su cierto éxito en los círculos culturales madrileños y sirvió para bautizar un grupo de autores variopintos, arriscados y ante todo muy independientes a los que, en general, interesaba más el andamio que el oropel. Y una de las personas que mejor estudiaron y fijaron las características de este colectivo fue el crítico literario Santos Alonso, fallecido el pasado mes de octubre a los 63 años.
La Casa de León en Madrid, cariñosamente ‘la embajada’, el lugar donde se fraguaron muchos de los encuentros y contactos que fortalecerían el boom literario leonés, acoge hoy un acto de recuerdo y homenaje a Alonso al que han confirmado su presencia, entre otros, Juan Ignacio Ferreras, Luis Mateo Díez, Jesús Torbado, José María Merino, Juan Pedro Aparicio, Julio Llamazares, Juan Carlos Mestre y Aurelio Loureiro, una reunión nada usual teniendo en cuenta sus múltiples compromisos, además del hecho de que renovará la histórica fotografía del encuentro de 1986.
Docente e investigador
El organizador de esta iniciativa, José María Hidalgo, miembro de la junta directiva de la Casa, recordó a este periódico que Alonso fue, además de docente de Lengua y Literatura tanto en Secundaria como en la Universidad, «un crítico literario independiente que llegó a convertirse en uno de los mejores de las promociones universitarias surgidas tras la implantación de la democracia en España». «Santos Alonso se interesó por las obras de autores españoles contemporáneos —continuó Hidalgo—, pero ello no le impidió acercarse con especial atención a la producción de sus paisanos leoneses, pues se da la circunstancia de que en esos momentos estaba eclosionando ‘el siglo de oro de las letras leonesas’ como le gusta decir a Félix Pacho Reyero».
De esta manera, Alonso estudió en destacadas obras la novela de transición (La novela española en el fin de siglo) y la literatura leonesa actual, con estudio y antología (Figuraciones), pero también ofreció colaboraciones y críticas para publicaciones como Ínsula, Lucanor, Quimera y, sobre todo, para la Revista de libros. Escribió importantes trabajos sobre Gracián, era un especialista en literatura barroca y preparó para Cátedra la antología de la obra poética de Eugenio de Nora.
Hidalgo, que también intervendrá en el acto de hoy (será a las 19.30 horas), resume que el objeto de este homenaje a Santines, como muchos le llamaban, es «agradecerle el inmenso trabajo que realizó en pro de la cultura y la literatura leonesa».
Fuente: El Diario de León.es 18-06-2013