Un equipo de investigadores de la Universidad de León ha descubierto el primer poblado del Neolítico en Asturias. Margarita Fernández Mier, la directora principal de la investigación La formación del paisaje del Noroeste Peninsular, ha sacado a la luz, junto a los miembros del equipo en el que participan cuatro estudiantes de la universidad leonesa, el primer poblado neolítico de Asturias.
Las distintas intervenciones arqueológicas que se están llevando a cabo en la aldea de Vigaña (Belmonte de Miranda) están aportando informaciones de relevancia. Entre los resultados, destaca la localización en varios puntos de la aldea asturiana de «evidencias de ocupación de época prehistórica, con dataciones radiocarbónicas que muestran la frecuentación desde el Neolítico de este espacio de montaña.
Mientras en el área de La Sienra se identificó un nivel de cultivo del III milenio a.C., en las zonas de L’Hortal y en Las Corvas se detectaron evidencias constructivas de estructuras domésticas del IV milenio a.C», explica Fernández Mier.
Destaca la zona llamada Las Corvas, donde los arqueólogos hallaron los restos de tres hogares relacionables con ocupaciones de los grupos nómadas que habitarían las montañas cantábricas durante el Neolítico, hace 6.000 años.
«La interpretación de este yacimiento señalaría la presencia de la primera cabaña neolítica documentada hasta el momento en Asturias». Además, el conocimiento de las formas de vida de las poblaciones prehistóricas de este valle sigue aumentando con la excavación del poblado castreño de la Edad del Hierro de El Castru, donde participan voluntarios de la Universidad de León y de otras universidades.
Los resultados de este Proyecto «muestran el rico patrimonio arqueológico del valle del Pigüeña, donde las gentes que habitaron este valle moldearon el territorio que les rodea durante milenios en función de sus actividades, entre las que destaca la ganadería.
Fernández Mier resaltó que «como resultado de la continua interacción entre las actividades productivas y el medio circundante, el paisaje se ha ido modificando generación tras generación, hasta dar lugar a su forma actual».
Cordillera Cantábrica
En principio, los hallazgos no estarían relacionados con el neolítico leonés, puesto que en la provincia es un periodo más desconocido, afirma la historiadora.
No obstante, nuevas investigaciones sí podrían indicar la relación asturiana con el caso leonés, porque, como informa la directora del proyecto, «se están encontrando excavando asentamientos de la Edad de Hierro que sí se pueden vincular con algunos de León, como el castro de Chano, o el de la Muela, situado en Laciana.
Los ejemplos que se pueden encontrar en León se dan en zonas montañosas próximas a las fronteras con el Principado y son debidas a la orografía y geografía de la montaña, preferidas por los habitantes de la prehistoria, debido a que son sociedades muy ganaderas y la Cordillera Cantábrica proporciona buenos pastos.
«Toda la montaña cantábrica se ha explotando históricamente desde un punto de vista ganadero y ahora se está abandonando y hay que reflexionar sobre ello», concluye Fernández Mier.
Fuente: El Diario de León.es 19-07-2013