En el impresionante salón de actos del Palacio del Conde Luna se puso ayer de largo una nueva fundación que llega dispuesta a participar activamente en la vida cultural leonesa, y para ello comienza lanzando al viento las coloridas banderas de más de sesenta artistas de toda España. Muy cerca del ejemplar foco de Cerezales del Condado y en un entorno en el que proliferan monasterios y otros restos históricos y artísticos de gran importancia, la Fundación Merayo intenta ocupar un espacio que en León no tiene precedentes, uniendo el arte y las actividades culturales con la naturaleza y ofreciendo la posibilidad a los creadores de tener un magnífico y sugerente lugar de creación y encuentro.
Gemma Rodríguez Berasategui, directora del Palacio del Conde Luna, fue la encargada de presentar el proyecto y a su creadora, la pintora berciana Ángela Merayo. «La Fundación Merayo —aseguró— tiene como objetivo canalizar un amplio espectro de actividades creativas, así como la difusión de obras de arte con especial atención a las artes plásticas, y albergará de forma permanente la obra de la pintora Ángela Merayo. La fundación se encuentra ubicada en un entorno natural de gran belleza, en la localidad de Santibáñez del Porma, a unos doce kilómetros de la capital. La singularidad del edificio que la acoge permite ofrecer a los artistas amplios espacios de trabajo y expositivos, además de posibilidad de alojamiento y residencia temporal. Todo ello convierte a la fundación en una verdadera casa de artistas en la que se propician el encuentro y la convivencia creativa».
La iniciativa cuenta con varios años de gestación durante los cuales Ángela Merayo ha ido construyendo con apasionado afán esta ilusionante casa de artistas que aún tiene por delante un largo camino para llegar a colmar todas sus previsiones, todas las ilusiones de la artista.
Un camino «difícil»
«Hace algunos años —explicó—, mi marido Jesús y yo decidimos que era el momento de enfrentarnos a un reto que hacía tiempo que teníamos en mente; crear en nuestra tierra de origen un centro encaminado a la creación y difusión artística, que fuera al tiempo contenedor de mi propia obra y espacio expositivo en el que pintores, escultores y artistas visuales en general encontraran la posibilidad de exponer temporalmente sus creaciones. Este proyecto, largamente acariciado y después de un camino ciertamente difícil, se ha hecho realidad hoy en este singular edificio, cercano al Camino de Santiago».
La aventura está llena de ambición y tiene como objetivo ser el auténtico motor cultural de esta zona rural a la orilla del río Porma. «Nuestra oferta —aseguró Merayo— se completará con diferentes acciones socioculturales como conciertos, conferencias, presentación de libros, lectura de poemas, mesas redondas, proyecciones… Abriremos las puertas a las personas del entorno ya que queremos que se sientan como una parte más de este proyecto, y que encuentren dentro de esta casa un espacio para la comunicación y la relación interpersonal».
A pesar de que las obras de acondicionamiento continúan, el próximo día 21 se pondrá en marcha el primer acto de la programación del centro con una muestra colectiva en las que participan cerca de setenta artistas, la mayoría leoneses y catalanes, las dos tierras de Ángela Merayo, pero también de otros lugares de España. El patio central del antiguo Seminario se llenará de grandes telas, pletóricas de color, que darán nueva vida a sus viejos muros. Y en la preciosa capilla y en otra sala ya restaurada se exhibirán obras de los artistas participantes junto con algunos trabajos de Ángela Merayo, que con el correr del tiempo integrarán la exposición permanente de la artista berciana en esta nueva fundación.
Fuente: El Diario de León.es 13-06-2014