Unas catas estratigráficas podrían arrojar más luz sobre la identidad oculta de la pintura de un caballero aparecida en Gordaliza del Pino detrás de un retablo. La inscripción encima de la figura, tapada aún por el enlucido del muro, podría ser la clave. Pero primero habrá que determinar si es coetánea a la pintura del caballero, lo que significaría que están relacionadas.
Estas catas comenzarán a realizarse a partir del próximo mes de abril, según confirma el restaurador José Luis González Santos, al mismo tiempo que los trabajos de recuperación de la pintura. Además, las catas que se realizarán en un hueco situado bajo la misma podrían descubrir una sospecha que ya han apuntado varios expertos: la posibilidad de que la pintura señale el lugar de una tumba.
«Podría tratarse de un alabardero de esta zona. Un sargento de infantería», apunta González Santos. Margarita Torres, profesora de Historia Medieval en la Universidad de León, también sugiere la posibilidad de que se pueda descubrir un enterramiento bajo la pintura.
Tanto las catas sobre la inscripción como el descubrimiento de esta posible tumba podrían ayudar a desvelar la identidad de este misterioso caballero…. o dama. Porque algunas hipótesis, como la de Vicente García Lobo, catedrático y paleógrafo de la ULE, apuntan a una posible identidad femenina.
«Los rasgos de la cara son muy finos y en la coraza parece que algunas líneas intentan marcar el pecho», declara García Lobo. Desde luego sería un descubrimiento singular que el caballero fuera finalmente una mujer. Además no hay que olvidar que algunas de las palabras que se pueden leer en la inscripción gótica, aún tapada e invisible bajo bajo el muro, hablan de una «condesa».
Por su parte el párroco de Gordaliza, Jorge García, apunta que este caballero podría no ser una pintura única, sino pertenecer a un conjunto de pinturas bajo el encalado que recubre la iglesia. Un encalado que se hacía por cuestiones estéticas, pero también por considerarlo una medida higiénica que evitaba la propagación de enfermedades y pestes.
La pintura de un caballero en una iglesia desde luego no es la típica iconografía religiosa, pero no es tan insólita como pudiera parecer. Margarita Torres, profesora de Historia Medieval en la ULE, recuerda que en la iglesia romana de los Santos Cuatro Coronados hay pinturas con un séquito de caballeros armados. Es una obra del tercer tercio del siglo XIII, con lo que nuestro caballero les sacaría tres siglos más. «La alabarda y la espada, que es curva, apunta más a sable. Un arma de caballería, por tanto», afirma Torres.
Visitas para el caballero
El interés por este enigmático caballero ya ha atraído a algunos hasta la iglesia de Gordaliza del Pino. Sobre todo vecinos de los pueblos cercanos, pero ayer tuvieron unos visitantes inesperados: los conductores de la ‘Nave del Misterio’, que ayer aterrizaron en este pequeño pueblo del sureste leonés guiados por las luces del secreto de esta singular pintura. El popular programa Cuarto Milenio, conducido por Iker Jiménez, ha puesto su objetivo en mostrar a sus espectadores la curiosa figura de este guerrero que desveló hace pocas semanas DIARIO DE LEÓN y que, como un vecino más, se ha integrado en Gordaliza.
Encendiendo focos y micrófonos, un equipo de grabación del programa se desplegó ayer Gordaliza. Al frente estaba Nacho Ares, egiptólogo y reportero leonés, que también grabará durante esta semana algunos otros enigmas, como la figura de un demonio (rojo y con cuernos, como mandan los cánones) que apareció el verano pasado en un desconchón en la pared de la iglesia de Santiago, en Chana de Somoza.
A su lado, un nombre propio: ‘Hermógenes’, un mago cuya historia aparece en el capítulo noveno del Codex Calixtino. Su historia bien puede valer para un bestseller de Stephen King, pues se cuenta que Hermógenes quiso convertir a Santiago a la magia y pidió a los diablos que se lo trajesen encadenado, pero los demonios sucumbieron y en su lugar encadenaron a Hermógenes y le llevaron frente al apóstol. El mago temía que le matasen pero Santiago, que como santo que era debía de ser buen tipo, le dio un báculo con el que se libró de los diablos y se convirtió a la fe.
El caballero de Gordaliza y el demonio de Chana de Somoza. ¿La eterna lucha del bien y el mal? No descuadra el asunto en estos tiempos que corren. Y ahora la pregunta más difícil: ¿De dónde saldrá el dinero para levantar este encalado y descubrir los secretos de ambas iglesias? El caballero de Gordaliza empezará a restaurarse en abril, pero aún no hay dinero para intervenir en la zona donde ha aparecido la escritura gótica. Para Chana de Somoza de momento no hay nada. Al fin y al cabo, es un pobre diablo.
Fuente: El Diario de León.es 14-03-2013