La profesora de la Universidad María del Carmen Rebollo presenta una investigación en la que demuestra la buena convivencia de judíos y cristianos en el León medieval a través de las pinturas de la Catedral

Que los artistas son voceros de la realidad del momento que viven no es una originalidad. Desde siempre, la creación artística ha servido para denunciar o simplemente para presentar de qué manera transcurría la vida. La iconografía religiosa no escapa a esta regla y es una de las claves de las que historiadores e historiadores del arte se han servido para analizar cómo eran la sociedad y el poder de la época.

Eso mismo es lo que ha hecho la profesora de la Universidad María del Carmen Rebollo, que acaba de publicar los resultados de una investigación sobre la plasmación artística que Nicolás Francés realizó acerca de la imagen del pueblo judío en el León medieval. Las conclusiones del estudio, publicadas en la obra El mundo judío en la Península Ibérica: sociedad y economía, revelan una imagen del elemento hebreo relativamente neutral, libre del apasionamiento hostil de otros contextos, que corroborarían la tesis mantenida por los historiadores acerca de una estampa de cierta neutralidad en la convivencia entre judíos y cristianos en la ciudad de León. Y es que, según precisa la profesora, las imágenes de judíos presentes en la Pulchra están muy lejos de las que se encuentran en templos de otros lugares de España, en los que abundan escenas de profanaciones o actitudes morbosas, y se limitan a realizar una estricta traducción de los episodios sagrados, rubricada en la escena del Ecce Homo por la lectura de sus carteles.

«La obra de Maese Nicolás puede ser considerada un rico documento gráfico transmisor de unas vivencias y de las principales corrientes de pensamiento correspondientes a una época y a un lugar, merced a una determinada coyuntura, donde se combinaron factores religiosos, socioeconómicos y políticos muy concretos», destaca Rebollo. La profesora subraya el hecho de que la obra pictórica de Nicolás Francés hace evidente la dicotomía en la representación del elemento hebreo. «Por un lado, el respeto hacia los protagonistas del Antiguo Testamento; por otra la reprobación del pueblo judío, persistente en sus pecados y al que se atribuyen los peores defectos, reflejo de un sentir popular latente a lo largo de los siglos y que se desata a finales de la Edad Media», revela.

Algunas de las escenas de la Catedral en las que la imagen de los judíos aparece de manera respetuosa son las tablas de la Vida de la Virgen. En ella, el sancta Santorum sugiere cierta atmósfera hebraica, remarcado tanto por la presencia de los dos sacerdotes con atuendos rituales como por el ajuar que luce el altar. Así, están presentes el candelabro-palmatoria que mantenía vivo el fuego encomendado por yaveh, en el que en este caso se obvian los siete brazos con el fin de no incidir en símbolos eminentemente judíos. También aparecen la lámpara y el revestimiento textil del ara. «Todo ello, y la ausencia de iconos y representaciones figuradas explícitas, característica del ambiente religioso rabínico nos acerca a esa consideración positiva del mundo judío anterior a la venida de Cristo», manifiesta.

Vestimentas de sacerdotes

María del Carmen Rebollo considera que la solemnidad de la representación se incrementa gracias a la compostura, gestos y vestimentas de los sacerdotes. «Uno de ellos tiende la mano a María cubierto por un manto ribeteado en oro, el manto de oración con el que los judíos acuden a las sinagogas… Al otro extremo del altar, con un tocado con aire más orientalizante, otro sacerdote asiste a la ceremonia. Ambos lucen largas barbas como signo propio de honorabilidad y liderazgo dentro de su comunidad», considera la investigadora.

Asimismo, otros dos personajes se alejan del atuendo que debería considerarse propio de los judíos en un momento en el que se habían endurecido las leyes discriminatorias contra los judíos, degradando la convivencia y plasmándose en requisitos referentes a su apariencia. «Por el contrario, aquí se muestran ricamente ataviados, sin distintivo alguno y sí dignificando la escena con su lujo en el vestir: ribetes de piel, cuellos subidos, amplias mangas y hasta un puñal al cinto».

Frente a esta concepción, la Catedral acoge pinturas en las que el elemento judío se degrada, en escenas que transmiten una valoración negativa y un juicio claramente condenatorio. Son aquellos que hacen referencia a la vida de Jesús. Una de ellas es la escena de Jesús ante el pueblo representada en la girola. En ella, Rebollo destaca hasta qué punto la fecunda creatividad de Nicolás Francés se hace evidente en la variedad de tipos humanos que aparecen encarnados en dos grupos, el de los judíos y el de los gentiles.

La animadversión se transmite principalmente a través de los matices caricaturescos que Nicolás Francés utiliza y que conllevan un aspecto grotesco. Es el caso de Judas, que aparece caracterizado con una gran nariz ganchuda. «Crueles sayones en poses forzadas y de rostros exagerados, deformes criados y un bullicioso populacho que en su abigarramiento va acrecentando la tensión que agudiza el concepto de pueblo cruel y deicida, incapaz de reconocer la verdadera doctrina», subraya la investigadora.

Fuente: El Diario de León.es 25-03-2013

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La poeta Cecilia Quílez acude a ‘Las noches de R. Burns’ en León

La poeta Cecilia Quílez recitará mañana sus versos dentro de los encuentros literarios que propician Las noches de R. Burns, un proyecto dirigido por el poeta Rafael Saravia, fundador del Club Leteo.

La cita será a las 21.00 horas en el Chelsea Bar, en León. La poeta gaditana Cecilia Quílez ha publicado cuatro libros de poemas: La posada del dragón, Un mal ácido, El cuarto día y Vísteme de largo.

La crítica ha valorado en numerosas ocasiones el valor de su voz poética y la musicalidad y simbolismo de su obra.

Quílez también ha sido incluida en antologías como Entre el clavel y la rosa (Espasa Calpe), Madrid Capital (Editorial Sial), Madrid, una ciudad de muchas voces (Arteidea) y El río de los amigos (Calambur).

Algunos de sus poemas han sido traducidos al inglés, italiano, portugués, árabe y holandés. Quílez también tiene numerosos artículos en publicaciones y participa habitualmente en recitales, conferencias y jornadas sobre literatura. Acaba de ser incluida en una antología de poetas españoles y portugueses y trabaja en la finalización de una novela y un cuento para niños.

Las noches de R. Burns, tituladas así en honor al poeta escocés Robert Burns, pionero del movimiento romántico, es un proyecto iniciado el pasado mes de enero que busca traer a León a algunos de los mejores poetas residentes en nuestro país. De momento ya han pasado por la capital leonesa los escritores Roger Wolfe y el poeta villafranquino Juan Carlos Mestre, Premio Nacional de Poesía por su obra La casa roja.

Fuente: El Diario de León.es 25-03-2013

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Marruecos premia a Gamoneda con el Premio Argana de Poesía

¿Cómo saber en Casablanca qué es un témpano de hielo, cómo comprender el escalofrío de la escarcha al amanecer, la blancura de la nieve? Pero el frío no es sólo algo físico, también el dolor produce frío y qué decir de la muerte. Y si alguien ha sabido convertir esta sensación en poesía es Antonio Gamoneda, cuyo Libro del frío ha sido acogido como propio en esta ciudad marroquí, no obstante su Casa de la Poesía le acaba de conceder al poeta el Premio Internacional Argana.

Es un premio avalado por el Ministerio de Cultura de Marruecos y que Gamoneda recibirá en Casablanca el próximo 30 de abril durante la Feria Internacional del Libro. Además el galardón propicia la traducción y edición en árabe de otras dos obras de Gamoneda: Descripción de la mentira y su último libro, Canción errónea.

«Este premio tiene la pretensión de representar la receptividad de la sensibilidad árabe hacia la poesía en todas las lenguas», explica Gamoneda, que añade que la traducción la realizará el mismo autor que llevó al árabe su Libro del frío, Almahdi Akhrif. «Mis traducciones a lenguas como el coreano, el japonés o el árabe siempre me dejan más tranquilo porque como no las entiendo, supongo que están bien. La poesía, de alguna manera, es intraducible», ironiza Gamoneda.

Este premio lo han recibido, hasta ahora, los poetas marroquíes Mohamed Serghini y Tahar Ben Jolloun, además del iraquí Saadi Youssef, el palestino Mahmoud Darwish y, fuera del mundo árabe, el chino Bei Dao y la norteamericana Marilyn Hacker.

Antología en Egipto

Gamoneda subraya sus lazos con el mundo árabe y también la vitalidad de la poesía en esta lengua. Incluso ahora, tras las revoluciones que han supuesto un auténtico revulsivo en estos países.

«La poesía suele funcionar bien cuando los tiempos funcionan mal. Los países árabes están en una circunstancia difícil, pero la poesía sigue ahí. El problema histórico parece dinamizante de la poesía, provoca una tensión creativa», destaca el poeta.

Precisamente Egipto, uno de los países donde la llamada primavera árabe más cambió la realidad política al provocar el derrocamiento del gobierno de Hosni Mubarak, está preparando una amplia antología de la poesía de Gamoneda.

La Casa de la Poesía de Marruecos se fundó en 1996 para proporcionar a los poetas un lugar de encuentro y reunión. Publica una revista trimestral titulada Al Bayt, organiza talleres y encuentros entre poetas y pintores, invita al país a destacados poetas internacionales, organiza un festival internacional de poesía e incentiva con un premio la creación de los poetas jóvenes.

¿Y sienten el frío estos poetas marroquíes? Claro, porque, explica Gamoneda: «el frío y sus accidentes tienen una connotación simbólica. Entiendo que se han identificado conmigo». De ahí este merecido premio.

Fuente: El Diario de León.es 25-03-2013

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Juan Pedro Aparicio se adjudica el premio de las Letras de Castilla y León

Acaba de finalizar una novela que le lleva en esta ocasión a las tribulaciones ‘francesas’ que Jovellanos atravéso al final de su vida y que se publicará en la primavera del 2014. Mientras escribe lo que él califica como un filandón de lores —un conjunto de relatos con Londres de protagonista geográfico— recibe la noticias de la concesión del premio de las Letras de Castilla y León. «¿Abrumado? Tendrían que restringir la concesión de premios», ironiza para agradecer a continuación la adjudicación del galardón.

Especialmente satisfecho se muestra con las razones que el jurado ha expuesto para otorgarle este reconocimiento: su dedicación y compromiso con una literatura muy personal e imaginativa reveladora de la realidad y el tiempo de su poderosa memoria. Y es que para Juan Pedro Aparicio la memoria articula la creación literaria. «En mi caso, la memoria es una memoria de emociones porque se vertebra a partir de la infancia, un momento en el que la intensidad de las emociones tiene una potencia virginal», destaca el autor de El año del francés. «El milagro de la niñez es que no necesitas vivir las experiencias para sentir todas sus emociones», subraya.

Acerca de Lot, esa protoespaña que le acompaña en algunas de sus novelas, destaca que ha cambiado mucho. «Ahora tiene un empaque de ciudad que antes no tenía», defiende. Aparicio reconoce que podría tener más pujanza, pero asume que «en el dorsal de la vida española nos ha tocado este papel».

No se olvida de Sabino Ordás, el crítico errante de Ardón. «No he hablado con él. Supongo que dirá lo mismo que Luis Mateo Díez y José María Merino», destaca el escritor, que lamenta que el profesor ya casi no salga de Ardón a causa de su edad.

En cuanto al discurso que pronunciará el próximo 22 de abril, apunta a que tratará de prestar la voz al resto de premiados. «Me parece un honor inmenso, y una responsabilidad, sobre todo porque tengo la intención de ser claro y consecuente», subraya Aparicio, que siempre ha defendido la singularidad leonesa. El premiado destaca que la importancia de la comunidad radica en el hecho de que tiene dos regiones históricas con una historia paralela que converge en España. «Una de las características de León es que es una fábrica de españoles, y esta idea vale exactamente igual con los burgaleses, los abulenses o los vallisoletanos», reflexiona, al tiempo que defiende la necesidad de que se respete la riqueza de todas ellas.

Admirador de la cultura británica —desempeñó el cargo del Instituto Cervantes en Londres— Juan Pedro Aparicio subraya que el país cuenta con un público consumidor de cultura que sabe valorarla y pagarla. «Es una sociedad madura de la que tenemos mucho que aprender», asegura.

Obra y premios

El relato corto, con el que se dio a conocer, más tarde la novela y ahora también dedicado al microrrelato, revelan un escritor que no ha encontrado excesivos obstáculos para hacerse eco, a través de una «poderosa memoria», de la realidad que en cada momento le ha tocado vivir.

Lo constata el acta de un jurado que ha presidido Luis Mateo Díez, coterráneo, amigo y compañero de Juan Pedro Aparicio (León, 1941) en los populares ‘filandones’ que, junto a José María Merino, han protagonizado durante los últimos años para recuperar la vieja memoria de la tierra leonesa a través de relatos de tradición oral que se han mantenido vivos al transmitirse de una generación a otra.

Como narrador, el autor se dio a conocer el año de 1975 con El origen del mono y otros relatos, y ha publicado las siguientes novelas: Lo que es del César (1981), El año del francés (1986), finalista del Premio Nacional de Literatura, ambas recientemente reeditadas en Espasa Bolsillo; Retratos de ambigú, Premio Nadal de Novela en 1989; La forma de la noche (1994), Malo en Madrid o el caso de la viuda polaca (1996), El Viajero de Leicester (1997), Qué tiempo tan feliz (2000), La Gran Bruma (2001), Tristeza de lo finito (2007). El juego del diábolo (2008); y los libros de cuentos: La vida en blanco (2005, Premio Setenil) y La mitad del diablo (2006); así como la colección de microrrelatos Palabras en la nieve: un filandón. Su obra El Transcantábrico (1982) inspiró la puesta en marcha del tren turístico con el mismo nombre.

Es habitual en los filandones al lado de figuras de las letras como Luis Mateo Díez y José María Merino. Precisamente junto a Merino escribió el libro Los Caminos del Esla, una especie de reportaje literario sobre este río. Además, destacan en su obra Sabino Ordás: Las cenizas del fénix (1985), colección de artículos periodísticos. Y de nuevo con Luis Mateo Díez y José María Merino ¡Ah, de la vida! (1991), colección de artículos periodísticos, La mirada de la luna (Diez días entre los nietos de Mao) (1997). León (2003). Guía monumental y turística y Del cuento literario (2007) junto a José María Merino.

Del jurado del Premio Castilla y León de las Letras han formado parte, entre otros, la escritora leonesa Elena Santiago y el catedrático de la Universidad de León Nicolás Miñambres, así como el escritor y editor leonés Ernesto Escapa. Este galardón, sin dotación económica, es el primero de los ocho que, en diferentes modalidades, serán fallados en las próximas semanas antes de su entrega el 22 de abril.

Fuente: El Diario de León.es 23-03-2013

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El misterio de la cripta, al descubierto

Los restos romanos de Puerta Obispo han estado cerrados durante diecisiete años, menos algunos meses en 2006. No muchos leoneses conocen este tesoro oculto.

Por fin la puerta se abrió y, diecisiete años después (menos un breve periodo en 2006), se pudo bajar por las escaleras metálicas y entrar en uno de los lugares más desconocidos de León: los restos romanos de Puerta Obispo. La cripta arqueológica al lado de la Catedral, esa que los turistas señalan intrigados pero que nunca han podido ver, empezará a partir del próximo lunes a recibir visitantes. Serán catorce días de visitas gratuitas, hasta el 7 de abril.

¿Y después? «Lo valoraremos», respondía ayer el alcalde de León, Emilio Gutiérrez, a la pregunta sobre el coste de las entradas tras este periodo.

Si el precio no está aún fijado es porque, después de esta Semana Santa, el Ayuntamiento de León prevé incluir las visitas a los restos de Puerta Obispo dentro de la Ruta Romana, por lo que no se vería únicamente este yacimiento.

De esta manera se busca ‘resucitar’ esta fallida ruta que incluye, además de estos restos junto a la Catedral, la cripta arqueológica de Cascalerías, el depósito de agua en San Pedro, la muralla tardorromana, Puerta Castillo, la muralla altoimperial y tardorromana y el canal en el Jardín del Cid. Con este objetivo, las concejalías de Cultura y Turismo se reunían en la tarde de ayer con la Asociación de Guías Turísticos de León.

«Estos restos de Puerta Obispo son el embrión de la ruta del León romano y queremos implicar a la Asociación de Guías Turísticos. Después de esta Semana Santa habrá visitas libres con un horario más reducido y se podrá ofrecer ya esta ruta», afirma el edil de Patrimonio, Juan Pablo García Valadés.

La visita a estos vestigios romanos no se realizará únicamente incluida en esta ruta, sino también según las peticiones de paquetes turísticos, grupos de escolares o de otro tipo, señala Valadés. Eso sí, está en el tejado del Ayuntamiento de León la pelota de decidir por fin tanto los horarios como el precio para ver el yacimiento.

Las razones de que esta cripta haya estado cerrada desde su descubrimiento en 1996, durante las obras de peatonalización de la plaza de Regla, pasan desde problemas legales con la empresa constructora, Teconsa, hasta el rechazo de Patrimonio a los proyectos realizados por el consistorio leonés para acceder a los restos. El último echaba por tierra (nunca mejor dicho) el proyecto de crear una especie de burbuja de cristal como acceso, una solución que se eliminó porque entorpecía la vista de la Catedral.

Tras las obras del nuevo acceso finalizadas ayer, la entrada a la cripta por fin cuenta con todos los parabienes. La intervención ha supuesto un desembolso de 16.000 euros, que se distribuyen en 12.000 para la empresa Decolesa, que llevó el proyecto, y 4.000 en materiales. La mano de obra no ha supuesto ningún coste, ya que se ha realizado con personal municipal de Patrimonio, la brigadas de Obras y el servicio eléctrico.

«Después de tantos años es una satisfacción poner esta cripta a disposición de los leoneses», se felicitaba ayer el alcalde de León, flanqueado por los ediles de Urbanismo, Belén Martín Granizo y de Patrimonio. Por otra parte, Gutiérrez señalaba que el anuncio de la Junta de declarar BIC los restos de Ad Legionem no modifica el proyecto de vial previsto para la zona, que habilita el uso de un puente ahora inútil. «Vamos a ejecutar las obras según el acuerdo de la Comisión de Patrimonio», afirmó.

No son muchos los leoneses que conocen los restos romanos de Puerta Castillo, que forman parte de la Porta Principalis Sinistra que daba acceso al campamento de la Legio VII. Ahora sus misterios vuelven a estar al descubierto. Esperemos que por mucho tiempo.

Fuente: El Diario de León.es 23-03-2013

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Se publica una guía con los estudios sobre la Catedral de León

Se abre con un documento conservado en el templo, un plano del siglo XVI que formó parte del pleito entablado entre el cabildo y varios propietarios afectados por el proyecto de reforma de la actual plaza de Regla. La guía que hoy se presenta paga la deuda contraída por la Catedral con el que fuera su archivero entre 1942 y 1953, Raimundo Rodríguez Vera, a partir de los escritos y documentos or él legados.

Plano del pleito entablado antre el cabildo y afectados por la reforma de la plaza de Regla en el siglo XVI.

La transcripción del texto original, conservado en el Archivo de la Catedral, ha sido realizada por Carlos Moráis Vallejo, quien junto a los historiadores del Sueño de la Luz recorrieron durante varias jornadas el templo, verificando los datos y tomando nota de las alteraciones que desde entonces han tenido lugar. La guía supone además la publicación de nuevas aportaciones gráficas, muchas de ellas inéditas, procedentes en su mayoría del Archivo de la Catedral, tanto del fondo gráfico antiguo y de colecciones públicas y privadas cedidas por leoneses amantes de su catedral.

La maquetación es obra del y en ella se han diferenciado gráficamente los dos planos cronológicos de su redacción. Es decir, si el lector así lo desea, podrá realizar el recorrido del templo según lo contempló en los años cuarenta del siglo pasado el autor, o bien optar por actualizar la mirada a las condiciones presentes.

Raimundo Rodríguez Vega dedicó gran parte de su vida a investigar los secretos de la Catedral y muchos de ellos aparecen en esta obra. Es el caso de la enigmática cara que aparece en una de las jambas del pórtico occidental y que para el erudito podría ser el retrato del escultor de la obra. Además, la guía permite al visitante vislumbrar algunas claves para contemplar los tesoros de la Pulchra desde el mejor lugar, si bien en ocasiones habría que hacerlo a través de la máquina ideada por Wells. Un ejemplo lo tenemos en el ábside: «Bajando a la plazuela de Puerta Obispo, podrá el visitante admirar bellezas que ni soñadas. Los cinco ábsides, en torno del principal, con su aparato de contrafuertes, arbotantes, pilas, antepechos y remates, con su infinita variedad en tonos de luz y sombras, producen un maravilloso efecto. El mejor punto de vista se tiene desde las huertas de enfrente a las que se puede entrar hacia la mitad de la calle de san Pedro.

Uno de los capítulos más interesantes es el que hace referencia al museo catedralicio. Y lo es porque da una idea de hasta qué punto se ha modificado la conciencia patrimonial. Escribía el canónigo sobre un museo en un momento en el que éste aún no era más que un buen propósito: «En varias ocasiones durante las obras de restauración de la iglesia, se intentó formar un museo catedralicio, pero nunca pasó de buen deseo». Sabemos, además, por don Raimundo, que su instalación se verificó en el año 1917, siendo fabriquero Clodoaldo Velasco. Asimismo, nos explica que por entonces se hallaba repartido en tres departamentos que se comunicaban entre sí. Uno de ellos reunía capiteles románicos y piezas obtenidas de las excavaciones arqueológicas. En el centro se encontraban tesoros como cálices, coronas, cruces procesionales, aras o sacras esmaltadas. En tercer lugar estaba el que anteriormente había sido Capilla de la Trinidad. En éste se conservaban, entre otras cosas,. imágenes, arcas, el armario morisco y los códices.

El paseo a través de los ‘muertos’ de la Catedral también se cobija en el libro. Es el caso del que alberga al obispo don Munio, en el que apenas pueden leerse estas palabras, meras sombras de lo que el obispo fue en vida : … beatus pauper…

eat: flentibus hic: flebat: tan…

Soberbia es igualmente su descripción de las vidrieras, así como su visión, que resulta totalmente contemporánea: «Es curiosa e interesante a la vez una vista interior de la iglesia, de noche y bien iluminada, como por ejemplo en la Nochebuena, en que parece no tener vidrieras y solo se dibuja la osamenta o esqueleto».

En breve está previsto ofrecer esta guía también en formato digital, para su visualización en dispositivos como tabletas y lectores de libros electrónicos. Tanto la obra impresa como la futura edición digital se publican bajo licencia Creative Commons, casi por expreso deseo de Raimundo Rodríguez Vera que, a decir de uno de los artífices de la guía, fue un precursor de la cultura 2.0.

Fuente: El Diario de León.es 22-03-2013

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El Instituto Leonés de Cultura cobija el tributo de los artistas leoneses a Eloy Vázquez

Durante el último tramo del pasado siglo, con la dictadura agonizando y los resplandores de la democracia en el horizonte, los artistas leoneses vivieron momentos de bulliciosa actividad. Se reunían en grupos de trabajo, discutían apasionadamente de arte, pero casi más de política, y fueron capaces de realizar una importante serie de exposiciones colectivas con las que intentaron dejar atrás sus apasionadas rivalidades que siempre existieron y que nunca llegarán a diluirse, ni siquiera con el paso del tiempo que, según dicen, todo lo borra.

Pues bien, a ese momento y a esas circunstancias perteneció Eloy Vázquez Cuevas, un artista singular y polifacético que acaba de dejarnos. Dibujante publicitario, autor de cómic, cartelista con infinidad de premios, pintor y escultor, estas fueron algunas de sus facetas artísticas. Ahora, a partir de esta tarde, podemos ver un interesante resumen de su obra en el Palacete de Independencia, del Instituto Leonés de Cultura. Un largo recorrido por su actividad desde los ya lejanos y casi milagrosos años sesenta del pasado siglo, hasta casi el momento en el que nos dejó.

Pero en la exposición, que dedica dos salas y el Espacio Emergente a la obra de Eloy, no solamente estará el recordado artista. Van a acompañarle todos sus compañeros de entonces, pintores, escultores y diseñadores gráficos que vivieron momentos de ilusión a su lado, sus amigos, algunos también desaparecidos, estarán también en el ILC. Serán 28 los que ofrecerán un sentido homenaje a Eloy aportando muchas de las obras que convivieron con las suyas en los finales del siglo XX.

Intelectualidad

También había escritores en aquel grupo, como Pérez Herrero o Julio Llamazares y otra mucha gente, como nos recuerda el catedrático, Manolo Valdés: «La inesperada, al menos para mí, muerte de Eloy, ha sido el resorte que ha disparado el recuerdo de los distintos acontecimientos que hicieron de los dos últimos decenios del siglo XX mi pequeña nación. Debo aclarar que entiendo por nación una «sociedad formada por individuos que comparten los mismos recuerdos» y Eloy Vázquez forma parte de mis recuerdos, junto con Modesto Llamas, Juan Carlos Uriarte, «Toño» García, Julio San Martín, Ramón Villa, González Cuenca, Díaz-Faes y de otros que, como Eloy, también han desaparecido: Enrique Estrada, Pedro Cármenes, Joaquín Soler y Santiago García. Aquel pequeño estado, regido por un sistema político que oscilaba entre una república de las artes y de las letras y el ruidoso patio de Monipodio, disponía de un parlamento de carácter itinerante que celebró sus debates gracias a la hospitalidad de Ángel Marcos en la Bodega Regia, de Erundino («Nino») en el Cimanes y de Aurita y Lauren en el Montejos de la calle Matasiete».

Todos ellos estarán a partir de hoy con Eloy Vázquez en esta gran exposición que, en homenaje suyo, ha reunido a todos sus amigos y colegas. Es de agradecer que el ILC, y especialmente el responsable de su departamento de exposiciones, Luis García, se haya implicado en este evento que será para muchos una incitación al recuerdo y, para los más jóvenes, la posibilidad de conocer de primera mano el arte que se pensaba, se discutía y se hacía en León en los estertores del siglo XX, con la dictadura a la espalda y al frente la iluminación esperanzadora de tiempos mejores, que al final no han sido tan brillantes como ellos pensaban. Trabajaron unidos y unidos están ahora en el recuerdo de un amigo que se fue.

Fuente: El Diario de León.es 22-03-2013

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La Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes abre portales de Miguel Delibes y Juan Ruiz

Imágenes de Miguel Delibes

La Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes ha abierto dos nuevos portales dedicados a Miguel Delibes, de cuyo fallecimiento se cumple este mes el tercer aniversario, y Juan Ruiz Arcipreste de Hita, autor del gran texto poético de la Edad Media castellana Libro de buen amor.
Desde la naturalidad, Miguel Delibes (1920-2010), Premio Cervantes, «transmitió en sus creaciones valores como la libertad, la justicia social, la solidaridad, el humanismo cristiano y la conservación de la naturaleza», como explica María Pilar Celma Valero, profesora de la Universidad de Valladolid, codirectora de la Cátedra Miguel Delibes y directora del nuevo portal.
En cuanto a Juan Ruiz, es una personalidad tan atractiva como oscura y misteriosa. El profesor Miguel Ángel Pérez Priego, de la UNED, es el director de este nuevo portal.

Fuente: diarioinformacion.com 22-03-2013

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El Puente Castro romano será Bien de Interés Cultural

Vista de la ciudad romana de Puente Castro y, al final, el vial que, para conectar este barrio y La Lastra, pasa sobre los vestigios.

La Junta estudia declarar Bien de Interés Cultural (BIC) la ciudad romana descubierta en Puente Castro y amenazada por la construcción del vial que unirá este barrio con el de La Lastra. La consejera de Cultura, Alicia García, anunció ayer en el Pleno de las Cortes de Castilla y León que dará la mejor «protección jurídica» a estos restos romanos «dada su importancia». La consejera del PP respondía así a la pregunta del procurador de la UPL, Alejandro Valderas, sobre el estado de abandono de la villa (vicus) que se extendía a lo largo de siete hectáreas y que llegó a tener 5.000 habitantes.

Desde hace meses, asociaciones en defensa del yacimiento, como Promonumenta, han reclamado a la Junta que preserve unos hallazgos de excepcional valor. Sin embargo, el gobierno autonómico ha defendido su protección y, al mismo tiempo, la construcción del vial.

El dictamen que emitió en octubre pasado la Comisión de Patrimonio Cultural fue una pura pirueta semántica: exigía la conservación de la ciudad romana y su enterramiento; y dos meses más tarde, aprobaba el proyecto de conexión entre La Lastra y Puente Castro presentado por el Ayuntamiento de León.

Arqueólogos y asociaciones en defensa del Patrimonio dudaban ayer que un Ayuntamiento «en quiebra técnica» pueda construir el vial ni proteger unos restos que seguirán a la intemperie, como ocurrió en Lancia.

Este enclave es excepcional porque es el único vicus que ha aparecido en España vinculado a un campamento romano.

En lista de espera

Alicia García aseguró en las Cortes que el Gobierno autonómico está elaborando estudios e informes para tratar de delimitar la extensión del yacimiento y, con dicha información, se declarará BIC. En León hay trece expedientes que ‘duermen’ en algún despacho, algunos desde hace décadas, a la espera de este título: la Vía de la Plata, los Barrios de Salas, Villar y Lombillo, el hotel Alfonso V, la iglesia de Siero de la Reina, el monasterio de Trianos, los hórreos de Posada de Valdeón, el teatro Trianón, el casco antiguo de Ponferrada, las villas de Sahagún y Molinaseca, el casco antiguo de Bembibre y el castro de Corona de Corporales.

La titular de Cultura explicó que los técnicos de la Junta han planteado una propuesta para Puente Castro que conjuga los intereses patrimoniales y de los vecinos; «una solución técnica que compatibiliza la imprescindible conservación de los restos aparecidos y la ejecución del necesario acceso a Puente Castro, obligando a una modificación puntual del proyecto municipal».

Los hallazgos

La ciudad romana de Puente Castro surgió paralelamente al destacamento que se acantonó en lo que hoy es León. Las excavaciones desenterraron una decena de gigantescas construcciones, así como algunas calles.

Puente Castro hace 2.000 años se llamaba Ad Legionem Septima Gemina. En una campaña de prospecciones que tuvo lugar en el 2001, con motivo de las obras de la Ronda Sur, se localizaron además cuatro viviendas, una de ellas de planta basilical. En estas catas se recuperaron numerosos utensilios médico-quirúrgicos, lo que hace suponer que la villa era tan importante que tenía hasta galeno.

Entre las monedas, cerámicas y objetos rescatados en el yacimiento, destaca una espectacular gargantilla de oro y azabache que actualmente está depositada en el Museo de León.

Otras piezas, de apariencia menos llamativa, han permitido reconstruir quiénes eran y cómo vivían los pobladores de este vicus, mayoritariamente artesanos , así como familiares de los soldados de la Legio VII. En el 2001 aparecieron numerosas monedas que muestran la efigie de Filipo el árabe y que refuerzan la importancia que el vicus tuvo como arrabal o cannaba, donde se habría asentado la población civil relacionada con el campamento romano. Estas monedas vienen a consolidar la teoría de que la ciudad se convirtió en la residencia a la que acudían muchos de los legionarios que habían establecido lazos familiares y que, al licenciarse, decidían permanecer también junto a su prole.

En la última campaña de excavaciones se invirtió medio millón de euros. Aunque resulte una paradoja, proteger los hallazgos pasa por taparlos, excepto que se musealicen, lo que exigiría nuevas inversiones.

En septiembre Promonumenta organizó una marcha de protesta por los yacimientos abandonados, que partió, precisamente, de Puente Castro.

Esta asociación, así como vecinos de Puente Castro ya pidieron hace meses la declaración de BIC para unos restos que son únicos en el noroeste de Europa y están relativamente bien conservados.

Fuente: El Diario de León.es 21-03-2013

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León ‘cocina’ 648 libros pese a la crisis

León es una fábrica de historias. El año pasado la provincia ‘cocinó’ 648 libros. Casi dos títulos cada día. Estas cifras, hechas públicas ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), colocan a la provincia al frente de la comunidad autónoma, por delante incluso de la todopoderosa Valladolid, que únicamente editó 598 libros en el último ejercicio.

Sin embargo, la producción editorial sufrió un duro revés en León durante el último año, en el que cayó un 13,4%. Pese a este descenso, la provincia logró mantenerse entre las 20 primeras (en concreto, en el puesto 18) de España, donde en total se publicaron 69.668 títulos, unos 190 al día. Aunque los números pueden resultar fríos, tras ellos, hay poesía. Por ejemplo, uno de cada tres libros que se publica en León pertenece al ámbito de la literatura; el resto, corresponde a disciplinas como las ciencias sociales, las artes o las ciencias aplicadas.

Del total de libros depositados en la Biblioteca Nacional el año pasado, 60.219 fueron libros y 9.449 folletos; las publicaciones para niños alcanzaron 5.070 títulos, mientras que 1.876 correspondieron a libros de texto. Las tiradas en los últimos años se han reducido tanto que las editoriales sólo se atreven a sobrepasar el millar de ejemplares con los autores de bestsellers.

Que León sea una pequeña ‘potencia’ editorial no tiene mucho que ver con el hecho de que esta provincia tenga una abultada nómina de escritores, ya que la gran mayoría publica en sellos nacionales. Madrid, con 22.858 libros, y Barcelona, con 17.186, son los dos grandes núcleos de producción de libros. Muy por detrás, en tercera posición, se sitúa Valencia, con 2.690 libros publicados el año pasado. Los datos de esta pujanza del sector editorial contrastan con unos índices de lectura que siguen siendo poco alentadores: casi la mitad de la población no lee nunca.

Leer la crisis

Los resultados del Observatorio de la Lectura y el Libro, correspondientes al mes de febrero, sitúan a León entre las provincias que menos compran: 9,1 libros al año cada leonés, frente a los 10,3 libros en que se sitúa la media del país.

El gasto en libros es de 58,8 euros por hogar, tras una ligera caída. En las estadísticas es posible leer también la crisis en otro dato: el notable crecimiento de la asistencia a bibliotecas.

Según los datos del INE, los usuarios inscritos se incrementaron especialmente en 2010, alcanzando los 18,1 millones. De éstos, el 20,5% eran infantiles y el resto adultos. En seis de cada diez bibliotecas escolares se dispone de acceso a Internet y nueve de cada diez realizan actividades de fomento de la lectura.

El informe anual sobre Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España daba a conocer la valoración de los usuarios sobre sus bibliotecas. La puntuación media de las bibliotecas españolas es de 7,83 puntos. Las bibliotecas de Baleares (8,12 puntos), junto a las de Cataluña (8,01) y Navarra (7,92), son las mejor valoradas. En el extremo opuesto se encuentran las de Canarias (7,43), La Rioja, (7,50) y Castilla y León (7,68), aunque en todos los casos la puntuación es de notable.

Fuente: El Diario de León.es 20-03-2013

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