Supuesto retrato del compositor
Largo tiempo completamente olvidado, y luego aclamado en el siglo XX como un genio del barroco. El caso de Charpentier es muy parecido a del Johann Pachelbel y su celebérrimo Canon. Grandísimos compositores, relativamente exitosos en su momento. Ambos del primer barroco. Pero al fallecer, quedaron sumidos en el más absoluto de los olvidos. Solo la casualidad les redescubrió, ya en la segunda mitad del siglo XX, donde la popularidad de una de sus obras, trajo consigo un reconocimiento negado durante más de dos siglos.
En el caso de Charpentier fue el Te Deum, compuesto supuestamente para la celebración de la victoria en la batalla de Steinkirk, acaecida en agosto de 1692. El preludio instrumental de la obra fue elegido en 1954 como la sintonía de la Unión Europea de Radiodifusión, entidad organizadora del Festival de Eurovisión, donde suena al comienzo de la transmisión, así como en otros eventos retransmitidos por la UER.
Charpentier nació en París, en 1643. A mediados de la década de 1660, viajó a Roma, donde pasó tres años estudiando con el compositor Giacomo Carissimi, hasta dominar completamente el estilo italiano. A su regreso a París, Charpentier aceptó el empleo y el patrocinio de la poderosa y piadosa María de Lorena, conocida como Mademoiselle de Guise, última heredera de la ilustre familia Guisa.
A principios de la década de 1670, y ya conocido por su música religiosa, Charpentier acordó proporcionar música incidental para las comedias de Molière. Con asombrosa facilidad, el compositor de música sacra escribió una música ingeniosa y encantadora en perfecta consonancia con el genio para la comedia de Molière, como lo ejemplifica la extraordinaria partitura de «El enfermo imaginario» de 1673.
Sin embargo, la música sacra siguió siendo la principal vocación de Charpentier, y escribió constantemente misas, motetes, himnos y varias otras piezas litúrgicas. Después de la muerte de Mademoiselle de Guise en 1688, Charpentier encontró empleo en el colegio Louis le Grand, donde sus logros incluyeron el oratorio «David et Jonathas», una auténtica obra maestra. En 1698, Charpentier se convirtió en maestro de música para niños en la Sainte-Chapelle, permaneciendo allí hasta su muerte en 1704.
Después de su fallecimiento, sus sobrinos donaron todo su legado musical a la Biblioteca Nacional de Francia. Y pasados 250 años, concretamente en 1953, el musicólogo y religioso Carl de Nys, quien, buscando partituras antiguas de música sacra, dio casualmente con la obra de Charpentier.
Carl de Nys colaboraba con la Radiotelevisión francesa, y seguramente sacó a la luz la obra de Charpentier en los diferentes espacios de radio y televisión en los que participaba. Como comentábamos al principio, fue elegida como sintonía de la UER en 1954.
Como curiosidad, en 1971 Miguel Ríos hizo una versión del tema de Charpentier titulada «United», queriéndo repetir el éxito masivo del «Himno de la Alegría», basado en la 9ª sinfonía de Beethoven.
La musicóloga Catherine Cessac capturó la esencia de la música de Charpentier cuando escribió que: «la grandeza y originalidad de la música de Charpentier se debe a una combinación de talento musical excepcional y profunda fe, cada uno complementando al otro».
Sintonía Oficial de la UER (Eurovisión)
Charpentier (Te Deum Completo)