En 2013 el refugio de animales Animal Rescue League of Berky County, en Susquehanna Valley (Filadelfia), puso en marcha el programa Book Buddies (Colegas de libros).
Esta iniciativa invita a que niños de entre 6 y 13 años dediquen una parte de su tiempo y de su energía a leer en voz alta a los gatos abandonados del refugio.
La actividad se lleva a cabo tras el acuerdo establecido entre el albergue y uno de los centros de enseñanza local. Ambos consideran que sus respectivos miembros obtienen beneficios de esta cooperación.
Los gatos parecen encontrar el sonido de la voz infantil muy relajante y reconfortante, además de beneficiarse de la convivencia con humanos que, dado el lugar en el que han acabado, no tiene motivos para haber sido ni frecuente ni favorable. El trato relajado con los niños que se les acercan y comparten con ellos momentos agradables, ha favorecido el número de adopciones de los felinos.
Pero esta interacción también es ventajosa para los niños, quienes al contar con un auditorio carente de pretensiones críticas, actúan sin miedo a los juicios; cuando se adentran en la lectura, amplían sus conocimientos, se sienten más seguros de sí mismos, mejoran sus habilidades lectoras y de aprendizaje de contenidos, y además descubren de forma natural que la lectura puede ser un acto compartido que produce una enorme satisfacción
Los beneficios para el desarrollo emocional son importantes, pues en el proceso intervienen sentimientos como la compasión y la ternura, o valores como la protección del débil, la solidaridad hacia los más desposeídos y la valentía de dar voz a los que no la tienen. Ofrecer tiempo y atención a otros seres vivos es un acto de generosidad que no solo es provechoso para el que lo recibe: también para el que lo da.
Y además están las galletas y las pegatinas que los chiquillos consiguen como premio…
Curiosa y genial iniciativa, nos ha encantado
Me encanto, deberían de hacer más cosas así hoy en día.
Amo a los gatos.
Saludos,
Mariela