El autor y su obra
John le Carré es, en terminología de espionaje, el nombre en clave de David John Moore Cornwell (Pool, Dorset, 1931). Detrás del seudónimo se ha ocultado la verdadera identidad del escritor cuya obra es considerada hoy de las más representativas de la narrativa de espías.
Comenzó a escribir en 1961 y hasta la actualidad ha publicado 23 novelas, varios ensayos y relatos cortos, y ha participado como guionista de algunas de las adaptaciones de sus obras al cine y la televisión e, incluso, como actor en dos de ellas. Es probable que, según él mismo comenta, si el servicio secreto de su país no le hubiera dado permiso para publicar la novela que le hizo mundialmente famoso, The Spy Who Came in from the Cold (1961) (El espía que surgió del frío), puede que su vida hubiera sido otra muy distinta. Comenzó su carrera diplomática en el Servicio de Asuntos Extranjeros en la Embajada Británica en Bonn:
“Escribí «The Spy Who came in from the Cold» a los 30 años, en la soledad de un intenso estrés personal y en absoluto secreto. Como agente de inteligencia y en el papel de joven diplomático…. yo era un secreto para mis colegas y, la mayor parte del tiempo, para mí mismo”.
El uso de un seudónimo fue una de las condiciones que le impuso el servicio de inteligencia antes de conceder el permiso de publicación de sus dos primeras novelas. Después de una minuciosa y prolongada revisión del manuscrito de su celebérrima novela, finalmente, concluyeron que la historia en ella narrada no suponía la revelación de actividades secretas reales ni afectaba a la seguridad diplomática. Hoy, todavía, John le Carré se lamenta de que fueran únicamente ellos los que interpretaron “correctamente que el relato era mera ficción de principio a fin” (The Guardian, 2013).
Ningún hecho del relato procedía de su experiencia personal y, sin embargo, toda la prensa mundial vio y en esta obra una representación auténtica del mundo del espionaje e, incluso, que contenía un mensaje revelador sobre el otro lado del Telón de Acero. Y, así, mientras la crítica aclamaba la aparición de un nuevo escritor que desvelaba el misterioso mundo del espionaje, John le Carré con “asombro y rabia”, veía cómo adquiría una etiqueta que iba a calificarlo de por vida:
“Para los críticos de la época…. yo era el espía británico que había salido de ese mundo cerrado para contar cómo era en realidad y, todo lo que yo dijera para desmentirlo, reforzaba aún más el mito”.
Fotograma de la película «Dr. No», del año 1962
A la consolidación de este mito contribuyó un lectorado aficionado que desesperadamente esperaba un antídoto al apuesto e invencible superhéroe James Bond de Ian Fleming, su inmediato predecesor. Ian Fleming morirá en 1964, un año después de la publicación de su tercera novela.
John Le Carré fue profesor de lenguas modernas en Eton College (1956-58) y en 1959 ingresa en el cuerpo diplomático. Habrán de pasar unos años hasta que Le Carré confirmara su identidad como espía durante su servicio en la Embajada Británica. En 1964, como él mismo afirma, le liberaron y desde entonces su labor como escritor de ficción y periodista se ha prolongado hasta la actualidad. Su última novela A Delicate Truth se publicó en 2013.
Fotograma de la película «La gente de Smiley», del año 1982
George Smilie, agente del servicio de espionaje Circus, es el personaje más conocido de las novelas escritas durante la Guerra Fría, el “anti-bond” que ganó su fama también gracias al cine. El espía que surgió del frío y George Smilie supusieron para la fórmula de espías lo que Sam Spade y El halcón maltés para la narrativa de detectives: durante las décadas posteriores a la I Guerra Mundial y hasta la caída de la URSS, la narrativa de enigma se convierte en un vehículo de compromiso moral entre el escritor y el desgarrador devenir de la historia del siglo XX. Este era el sentido que Le Carré quería dar a sus creaciones: el mundo del espionaje de sus novelas debía ser entendido como una metáfora del mundo real de las que se desprendiera el conocimiento, la reflexión, la denuncia y el compromiso.
“Qué he aprendido durante los últimos 50 años… Simplemente que la moral del mundo del espionaje es muy similar a la de cada uno de nosotros (What have I learned over the last 50 years? …. Just that the morals of the secret world are very like our own)”
Con la caída del muro (1989), la desaparición del Estado Soviético y los posteriores efectos catastróficos de la globalización financiera y neoliberal, John Le Carré continuó manteniendo su postura comprometida y redirigió su mirada hacia los nuevos poderes que ahora amenazan la desintegración de la sociedad global. The Tailor of Panama (El Sastre de Panamá),The Mission Song (La canción de los misioneros), A most Wanted Man (El hombre más buscado), Our Kind of Traitor (Un traidor como los nuestros) y su última novela (Una verdad delicada) constituyen un alegato demoledor contra las grandes corporaciones, los poderes económicos y la corrupción política a gran escala. Son estas palabras del escritor las que subyacen en todas sus obras como un llamamiento desesperado:
“La democracia termina y el fascismo comienza ahí donde el poder político y de las empresas son inseparables”.
The Constant Gardner (El jardinero fiel) (2001) es la ofensiva más radical contra el efecto letal de las multinacionales en las comunidades más pobres del planeta, en concreto, contra las empresas farmacéuticas y la experimentación de sus nuevas fórmulas en la población más débil, causando la enfermedad y la muerte.
Conoce el compromiso del escritor:
«La barbarie es fruto de la mediocridad» (Fuente: Diario El País)
Guía para la lectura de «El jardinero fiel»
- El narrador y los puntos de vista.
- El tiempo de la narración y el tiempo de la acción.
- La trama de intriga: la narrativa de detectives actual y el patrón clásico de la novela negra.
- Función de los personajes protagonistas Arnold Bluhm / Tessa vs. Justin y la evolución de este último personaje en la acción.
- Tessa desde la perspectiva de género. El heroísmo femenino.
- Justin: el héroe épico y “la búsqueda”.
- La relación de Justin y Tessa desde la perspectiva de la convención social y romántica.
- La condición moral de Sandy Woodrow y su significación en la relación con el resto de los personajes y la acción.
- La función de los personajes africanos.
- La articulación de los diferentes escenarios.
- La pervivencia del imperialismo colonial británico y los nuevos imperialismos.
- Los conflictos temáticos planteados por el escritor y su consecución.