Los atacantes: Coloquio participativo de guía a la lectura

Por Natalia Álvarez Méndez

Alberto Chimal

10624579_914666155212001_7469314215656803191_nAlberto Chimal, nacido en 1970 en la ciudad de Toluca, capital del Estado de México, se perfila como uno de los escritores más talentosos y originales de su generación en el ámbito de las letras mexicanas actuales. Así lo constatan su inclusión en las antologías más relevantes de las nuevas voces de la narrativa de su país y los numerosos premios literarios recibidos. En su prolífica obra –al margen de sus colaboraciones en revistas virtuales y de sus publicaciones de dramaturgia, de ensayo, de antologías y de crónicas y artículos–descubrimos libros de cuentos como Vecinos de la tierra (1996), Gente del mundo (1998, 2014), El ejército de la luna (1998), El país de los hablistas (2001), Éstos son los días (2004), Grey (2006), La ciudad imaginada (2009, 2013), Siete. Los mejores relatos de Alberto Chimal (2012), El último explorador (2012), Manda fuego (2013); minificciones surgidas en el contexto de la literatura digital como El viajero del tiempo (2011), 83 novelas (2011) y El gato del viajero del tiempo (2014); novelas como La torre y el jardín (2012); y la novela gráfica Kustos. Libro 1: La puerta secreta (2013).

Sintetizando su poética, se puede aseverar que, junto a libros de sesgo realista como Los esclavos (2009), cultiva de modo original la literatura de lo insólito, de la imaginación, alejándose de los prejuicios relativos a este tipo de textos. Acoge bajo ese amplio término la introducción de lo maravilloso, lo mítico, lo fantástico, el horror, lo extraño y la ciencia ficción, modalidades genéricas que le permiten reflexionar con profundidad sobre el mundo y las experiencias humanas. Pretende forjar, de ese modo, una obra no complaciente, alejada de la mera evasión, con textos que se rebelan y manifiestan una conciencia política, una crítica a la hipocresía y al cinismo de nuestro tiempo. Gracias a las diversas estéticas de la literatura de lo insólito logra poner en crisis nuestra idea de lo real pero, sobre todo, nos acerca de manera crítica a nuestra visión y construcción de dicha realidad. El conjunto de su obra literaria ofrece su personal lectura del mundo y de la naturaleza humana, así como el significado último de esa recreación de lo extraordinario y de lo perturbador en su narrativa.

  

Los atacantes

Información contenida en la contraportada:

Los atacantes, de Alberto ChimalLas cámaras de seguridad nos han dado la tranquilidad de tener a alguien velando por nosotros. También la incertidumbre de que siempre pueda haber algún otro vigilándonos. La ciencia ha erradicado enfermedades, pero también ha creado monstruos e infecciones impensables. El correo electrónico, las redes sociales, un teléfono en el bolsillo: consuelos para la soledad, mejoras en la comunicación, pero también el principio del fin. Acosadores, stalkers, suplantadores. Atacantes de nuestro confort.

 Con un imaginario y una estética absolutamente personales, Alberto Chimal –una de las grandes revelaciones mexicanas de los últimos años– nos ofrece, agazapado entre siete magistrales relatos, el terror con el que convivimos, aun sin percatarnos. Un libro de cuentos de miedo –no necesariamente de horror– que mira en las esquinas más negras de nuestra sociedad, sin renunciar tampoco a la imaginación más libre, a la mirada más fantástica, al humor e incluso a la poesía. Aunque esta sea la poesía que llega con el final del mundo.

 

Estructura del libro:

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Vitriol, estrella de siete puntas. (Visita Interiora Terras Recti-ficatur Invenies Ocultum Lapidum).

Los atacantes es un volumen de cuentos que presenta siete historias inquietantes. Puede ser una coincidencia pero el siete es un número de gran fuerza simbólica que siempre ha atraído a Chimal. En el epílogo de Éstos son los días aludía a su potencia evocadora:

 Para asistir a quien quiera interpretar ese orden, diré que son siete las direcciones del espacio, como informa un Diccionario de símbolos: «dos para cada una de las tres dimensiones más el centro». (También, desde luego, podría mencionar la semana de bondad de Max Ernst, los siete brazos de la menorá, el triple siete del señor Perdurabo; las copas de los dones, las vidas del gato, los agujeros de la cabeza; las siete cabritas, los siete cabritos –son otros–, el cuadrado y el triángulo; las siete puertas, El séptimo sello, Los siete contra Tebas, Los siete samuráis, Los siete enanos; el arcoíris. Escoja usted.)

Booktrailer:

 

Inspiración para Los atacantes (cine y música):

  1. Vampyr (1932), de  Carl Theodor Dreyer (V.O. con subtítulos en Inglés).  Para verla, simplemente, como cuando se sueña (o se tiene una pesadilla…)
  2. Musica Ricercata (1951-1953), de György Ligeti. Composición nerviosa y viva, una de cuyas partes se empleó en Eyes Wide Shut (1999), de Stanley Kubrik
  3. Come to Daddy (1997)de Aphex Twin y  Chris Cunningham. Videoclip de tecnología-horror.
  4. Stalker, del album Unsound Methods (1997), con  Doug McCarthy. Proyecto Recoil, de Alan Wilder. Obsesión y acoso en estado puro.
  5.  Eliogabalus (1990), de Devil Doll


Palabras del autor:

En una entrevista, Alberto Chimal reconoce que la experiencia personal de sufrir un acoso real a través del correo electrónico, con páginas repletas de delirios religiosos relativos al apocalipsis y a seres sobrenaturales, generó la idea de escribir diversos cuentos que se convierten en un reflejo del desvalimiento del ser humano en nuestro mundo actual. De tal modo, emplea tanto argumentos y personajes clásicos de las historias de terror como personajes puramente actuales. Así logra profundizar en los miedos que hoy en día marcan los sucesos de la vida cotidiana de personas convertidas en víctimas desamparadas.

 

En una entrevista de El Universal, se reseña cómo el libro de Los atacantes incide en la tecnología y la violencia, hasta el punto que demuestra que el desarrollo de la tecnología digital tiene un reverso, “el de la vigilancia, el abuso de poder, el control social” a través de una serie de relatos en los que “no solamente aparecen las redes sociales, también están las leyendas urbanas de internet, y diferentes formas del poder y del abuso del poder en la época contemporánea”. En palabras del propio Chimal:

Todo esto está en algunos de los cuentos de este libro porque el libro en general está construido para contar historias de miedo, de inquietud, de angustia, son historias que se refieren a estos grandes temas de la narrativa de miedo que los tenemos desde el principio de la especie, al mismo tiempo está el contexto actual en el cual nacen los miedos de nuestra época y entre ellos está este miedo a la vigilancia, a los grandes poderes que no responden a nadie y que pueden hacer con los individuos lo que sea sin ser castigados.

A su vez, insiste en cómo el horror se vuelve cotidiano al compartirlo gracias a la tecnología y mediante la resignación del individuo actual:

Todo esto como telón de fondo para ir contando las diferentes historias; de alguna manera es mi intento de dar una visión contemporánea de estos miedos de siempre, ancestrales, atemporales. Este es un libro bastante oscuro, bastante pesimista; casi ningún personaje tiene la posibilidad de la salvación o la redención, pero es que así se refleja el ánimo de nuestra época, este ánimo de impotencia, de desolación en el que vivimos cotidianamente; hay que asomarse a las conversaciones públicas en las redes sociales y podemos ver esa desazón. […]  De que ya estamos vencidos por estos grandes poderes fácticos, por estas corporaciones, por el crimen organizado, por el narcotráfico, parece que de alguna manera el mundo ya se lo han repartido y nosotros estamos como indefensos y rendidos a su merced.

Lectura:

Para acercarnos a Los atacantes y compartir nuestras lecturas de la novela podríamos responder, entre otras muchas, a preguntas como las siguientes:

Interrogantes generales

  1. ¿Compartes la idea de que la violencia, que nos llega desde cualquier punto geográfico a través de la tecnología, se ha vuelto cotidiana? ¿No deberíamos indignarnos, tal como ha expresado Chimal, contra la injusticia de quienes nos gobiernan?
  2. ¿Somos víctimas, seres indefensos, desprotegidos, en el contexto del actual desarrollo tecnológico y científico, y ante el poder político, económico y criminal?
  3. ¿Relacionas el motivo de los peligros del desarrollo tecnológico en el avance civilizatorio de la humanidad con alguna otra obra literaria o película cinematográfica que hayas leído o visionado?

Interrogantes específicos

  1. En el primer relato se percibe un juego con el narrador, con el punto de vista desde el que se nos cuenta la historia, técnica bastante frecuente en la obra de Chimal. En este caso concreto: ¿Entiendes plenamente la primera frase del relato al iniciar su lectura? ¿Cuándo crees ser consciente de quién narra la historia? ¿Te sorprende el final o lo habías anticipado en algún momento de la lectura? ¿Ese final te hace entender la primera frase del relato?
  2. En su intención de jugar con la realidad, de distorsionarla, Chimal experimenta también con otras estructuras a la hora de presentar sus historias. Hay varios relatos en los que juega con lo metaliterario (otra técnica común en su obra) al abordar la temática del Apocalipsis. ¿Has percibido esos planteamientos metaficcionales? ¿Han complicado tu lectura o han enriquecido tu perspectiva?
  3. En las páginas de Los atacantes se presentan numerosas críticas a los regímenes políticos abusivos y corruptos, a la falta de libertad y de conciencia del hombre actual para hacer frente a las injusticias, a los asesinatos, secuestros y toda la violencia generada por el narcotráfico, etc. ¿Qué frase o párrafo te ha llamado más la atención en ese sentido?
  4. En varios relatos se plantea la definición de lo monstruoso, relacionándolo asimismo con la violencia real experimentada en el mundo actual. ¿Te ha llamado la atención alguna afirmación en esa línea?
  5. Existen atacantes que pertenecen al ámbito de nuestro entorno contemporáneo, entre ellos acosadores, psicópatas, asesinos en serie, con doble personalidad, etc. ¿De esa vertiente, qué personaje te ha inquietado más?
  6. Otros atacantes pertenecen a la tradición de la literatura de la imaginación, como el zombi, el extraterrestre, el fantasma y el vampiro. ¿Por qué crees que Chimal los incluye en sus historias? ¿En qué relato o relatos localizas a cada una de estas figuras clásicas de lo insólito?
  7. ¿Has localizado en algún cuento el guiño al número siete?

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Un comentario en “Los atacantes: Coloquio participativo de guía a la lectura

  1. Carmen Muñoz

    La obra consta de siete cuentos cada uno con una temática distinta pero todas ellas forman parte un tema común, la violencia, en todas sus facetas y que está de rabiosa actualidad. Los personajes están basados en los monstruos legendarios que han aterrorizado durante siglos a los lectores pero que tiene perfecta cabida en estos tiempos:

    Silvia. La soledad marca desde el principio al fin este cuento, donde gracias a la tecnología se puede aterrorizar a cualquier persona, incluso a uno mismo.

    La Pipi, que nos describe el mundo del narcotráfico y los salvajes cárteles de la droga, que nos presenta a su ídolo literario como un zombi para que dé su punto de vista sobre su obra póstuma.

    Lic. Florencia, rebajado a ver la espalda a sus compañeros, acosado por correo electrónico y aterrado por extraterrestres.

    El reportero, el que difunde las noticias fabricadas para permitir las actividades del Atacante o asesino en serie.

    Rafael y Jauza, los dos últimos seres humanos, los anti-Adán y anti-Eva, condenados a ver que la muerte todo lo iguala.

    Él. Poseído por el alma de un hombre violento que asesinó a su amante por un sentimiento mezquino del que cualquiera es capaz.

    La señora y sus sujetos Marco y Elda, con su comportamiento no solo pasivo, agradecido (¡) y feliz (¿), hacia su vampiresa que los protege de ser convertidos en comida.

    RABIOSA ACTUALIDAD!

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