Songs of Leonard Cohen (1967)

Pocos álbumes de debut, del artista que sea, pueden igualar la calidad, profundidad y talento fuera de lo común que encierra este trabajo. Cohen, que debutó en la música a la tardía edad de 33 años, compuso una galaxia de poderosas canciones, llenas de sentimientos, de calidez, canciones que te llegan muy hondo y que pasan a ser imprescindibles en la banda sonora de tu vida.

Cohen, un estilo en si mismo, porque es inclasificable más allá de la manida etiqueta de cantautor. Nació en Montreal en 1934, en una familia de ascendencia judía, comenzó a interesarse al poco tiempo en la poesía de Federico García Lorca y durante su adolescencia, aprendió a tocar la guitarra y formó «The Buckskin Boys», un grupo de country-folk. Aunque comenzó tocando una guitarra acústica, pronto pasó a tocar una guitarra clásica tras conocer a un joven guitarrista español que le enseñó «unos cuantos acordes y un poco de flamenco»

.

Pero fue en la literatura donde Cohen empezó a desarrollar su talento. Publicó sus primeros poemas en marzo de 1954, carrera literaria que continuaría en los siguientes años, alternando la poesía con la narrativa.

En 1967, decepcionado por su falta de éxito como escritor, Cohen se trasladó a los Estados Unidos para comenzar una carrera como cantautor folk. Su canción «Suzanne», fue un notable éxito de la mano de Judy Collins, y durante muchos años fue su canción más versionada. Tras tocar en varios festivales de folk, ganó la atención de John H. Hammond, representante de Columbia Records que años antes fichó para la compañía a Bob Dylan.

Cuando llega el momento de componer las canciones de su primer álbum, el trabajo está ya medio hecho: Cohen sólo tiene que desarrollar la melodía propia de los poemas que escribe y trasladarlos hacia el medio musical. El resultado es majestuoso, brillante. «Songs of Leonard Cohen» no es un disco revolucionario o innovador, es sólo condenadamente especial

Las canciones en este álbum transmiten una extraña calidez, una belleza atemporal que huele y suena a pura poesía, como si la experiencia abstracta de leer unos versos se hubiera embotellado para el disfrute de todos. Mucho de lo hermoso del disco viene de la contribución musical del productor John Simon, pero no nos engañemos, son las letras de Cohen las que ascienden sobre la música y las transforman en experiencias espirituales, únicas.

Definido por el crítico Bruce Eder como «uno de los cantantes y compositores más fascinantes y enigmáticos de finales de los sesenta». Cohen es eso y mucho más, son las palabras que caen sobre nosotros como hojas en otoño o la fina lluvia que nos empapa cada vez que le escuchamos. Escúchenle y cálense hasta los huesos.

Songs of Leonard Cohen (Playlist)