«Llévame Libre y Salvaje, Llévame hasta el Mar». Manolo Tena (1951 – 2016)

Manolo Tena tenía tatuadas unas letras japonesas en su antebrazo que significaban «sobrevivir». Él era un superviviente y un poeta, uno de los músicos malditos que sobrevivieron a la Movida y a su propio éxito. Otros no pudieron sobrevivir tanto, sus «Antonios» (Antonio Vega y Antonio Flores) o Enrique Urquijo. El seguía hablando con ellos e incluso les dejaba un vaso de whisky en los bares que frecuentaron. «Para mí es como si estuvieran de viaje. Yo los siento conmigo». Ahora el también está de viaje, y siempre estará con nosotros.

La muerte de Manolo Tena, como en tantas otras ocasiones, ha supuesto un reconocimiento (tardío) y un redescubrimiento de su obra, que por supuesto fue mucho más que su admirable y admirado álbum «Sangre Española».

Con él perdemos a uno de los mejores letristas, o el mejor directamente, que ha dado la música española en los últimos treinta o treinta y cinco años. Más que hablar de un letrista al uso, hablaríamos que sus composiciones eran musicar sus poemas. Nunca hubo banalidad ni lugares comunes en sus letras. Siempre hubo profundidad, sentimientos y sensaciones que el destilaba como nadie. Era un malabarista de las palabras, que hasta en sus peores números, fascinaba al público.

José Manuel de Tena, más conocido como Manolo Tena, nació el 21 de diciembre de 1951, de origen extremeño (Benquerencia de la Serena, provincia de Badajoz) , vivió gran parte de su vida en el barrio de Lavapiés en Madrid. Trabajó en numerosos oficios: botones, aprendiz de imprenta, camarero, dibujante, vendedor… Ahorrando pudo comprar su primera guitarra y todo lo que puede lo invierte en discos y libros; poesía y rock, lo que el supo fusionar como pocos.

En sus inicios, utilizaba el seudónimo de «Lolilla Cardo» para subirse al escenario, cantando temas sociales con sarcasmo. Después del Servicio Militar colabora como músico en el disco «Babel» (1975) de Luis Eduardo Aute. Dos años después colaboró en el Laboratorio Colectivos Chueca, y es a partir de este momento cuando nace su primer grupo, Cucharada.

Cucharada es ante todo uno de esos voluntariosos grupos abanderados del entrañable «Viva el Rollo» de finales de los setenta, que debió merecer mejor suerte y sobre todo más medios. Sus actuaciones derrochan teatralidad, imaginería reivindicativa y divina improvisación, fusión rock y teatro que hacen un guiño a Frank Zappa, los movimientos mímicos de Lindsay Kemp y alguno de los planteamientos de grupos teatrales como Tábano y las Madres del Cordero.

El 5 de junio de 1978 graban para Chapa su primer sencillo «Social Peligrosidad / Libertad Para Mirar Escaparates»; Cucharada se erige como una formación molesta para la sensibilidad de las radio fórmula. No fue así en el festival popularmente conocido como Rocktiembre, donde dejaron huella y profesionalidad junto a otros como Leño, Coz y Topo ante un público estupefacto.

Esto les empuja a la grabación del LP «El Limpiabotas que Quería ser Torero» (Chapa, 1979), una obra de una creatividad exultante y con un rudo sonido, exhibiendo  letras que no dejaban margen alguno para eufemismos o metáforas, una música que era pura visceralidad.

Cucharada (El Limpiabotas que Quería Ser Torero) 1979

El grupo Alarma se forma en Madrid, después de la disolución del grupo Cucharada, ya que José Manuel de Tena y José Manuel Diez deciden crear un grupo al puro estilo pop rock del momento, teniendo como referencia principal al grupo británico The Police. Como pasaba en su referencia principal el grupo seria solamente de tres integrantes, y en un principio el nombre sería FBI, por aquello de la tres letras, pero más tarde cambiarían el nombre a Alarma influenciados por el grupo también británico The Alarm. La primera formación quedaría de la siguiente manera: Voz/Bajo: José Manuel de Tena, Guitarra: Jaime Asúa, Batería: José Manuel Díez.

Con esta formación comienza a dar pequeños conciertos por Madrid, hasta que por fin son los teloneros del mítico grupo Leño. Esto hace que sean contratados por el sello Mercury Records y en el año 1984 editen su primer disco bajo el título homónimo de «Alarma!!!».

Un año más tarde en 1985 vuelven a los estudios de grabación y al poco tiempo aparece su segundo trabajo bajo el sello de PolyGram Ibérica cuyo título es «En el Lado Oscuro». Por otro lado tras la salida de este disco se incorporan a la gira de Miguel Ríos, como teloneros e invitados de honor. Después de la posterior gira, el grupo se separaría definitivamente, tras esta separación, Tena decide probar suerte en solitario, y será conocido como Manolo Tena a partir de ese momento.

Alarma (Frío) 1985

Gracias a su amistad con Joaquín Sabina graba bajo el sello de Elígeme Records su primer disco que aparecería en el año 1988 con el título de «Tan Raro». Al mismo tiempo se dedica  a escribir para otros músicos como Miguel Ríos, Ana Belén, Luz Casal, Los Secretos y Siniestro Total. A pesar de los buenos temas que tenía este disco haciendo un buen rock urbano, el reconocimiento por parte de la crítica y el público no llegaba y tuvo que marcharse a Miami.

Manolo Tena (Tan Raro) 1988

Después de casi cuatro años recibe una llamada del vicepresidente de Sony Music Entertainment, que le propone un contrato con esta compañía a través del sello Epic Music. De dicho contrato se deriva la grabación del disco «Sangre Española» que aparecería en el año 1992. Se le reconoce como músico, principalmente porque este disco comienza a venderse muy bien, consiguiendo más de quinientas mil copias. Además comienza una gira por toda España siendo un éxito total, consiguiendo llenar todos sus conciertos. Con relación al estilo, de nuevo vuelve por los derroteros del buen rock urbano, con grandes letras y buenos ritmos.

Este trabajo es de los mejores de toda la música popular española, no hay canción que se pueda considerar de relleno, todas y cada una de ellas podrían ser el tema estrella del disco. Pocas veces se ha presentado al público un trabajo que derrochara talento en tales magnitudes.

Manolo Tena (Sangre Española) 1992

En 1995, Manolo Tena vuelve al estudio y tras componer los temas se edita un nuevo disco bajo el titulo de «Las Mentiras del Viento». Dos años más tarde vuelve a grabar otro disco con la misma compañía de discos bajo el titulo de «Juego para Dos». Esta vez la temática principal de las letras es la vida y el amor, dejando a un lado las composiciones melancólicas y dolorosas poéticamente hablando, dedicándose mucho más a las cosas cotidianas y sobre todo a las vicisitudes del amor.

Pero la calidad artística ya no es la misma, y el éxito alcanzado ni se aproxima al conseguido con «Sangre Española».

Pasa toda la década del 2000 sumido en ese ostracismo, víctima también de lo que el define como su «enfermedad». Pero el año 2015 supone su «resurrección» artística y mediática con la publicación del que al final ha sido su testamento musical, el álbum «Casualidades». Un trabajo en el que recupera la forma creativa y nos vuelve a envolver con sus historias, haciendo poesía de lo cotidiano. Además como curiosidad, destacar que los dos vídeoclips del disco fueron realizados en León.

«Casualidades», inicialmente debía llamarse «La Vida por Delante», fue producido por su hermano, Rafa Tena. «La Vida por Delante» es el título de una de las canciones del álbum, que escribió en Cuba, en uno de los centros de rehabilitación por los que pasó. El álbum estuvo precedido por dos singles: «Princesa Azul» y «Opiniones de un Payaso». Para la presentación del disco, Manolo Tena, ofreció diversas entrevistas en las que se confesó «en proceso de recuperación». El álbum entró en las listas de ventas de Itunes. Supuso también la vuelta a los escenarios de Tena, con conciertos en diferentes ciudades españolas, incluyendo un lleno en el Teatro Monumental de Madrid.

Manolo Tena (Opiniones de un Payaso) 2015

Manolo Tena (Princesa Azul) 2015

En febrero de 2016, se estrenó el programa de televisión «A mi Manera» en el que Tena junto a otros seis artistas españoles (Mikel Erentxun, Marta Sánchez, Antonio Carmona, Nacho García Vega, David de María y Soledad Giménez) a modo de «reunión de viejos amigos» comparten recuerdos y versionan los grandes éxitos de cada uno de ellos conviviendo en una casa junto al mar.

Manolo Tena: Un Extraño en el Paraíso (Documental) 2015

Entrevista y Concierto Acústico con Manolo Tena (RNE) 27/09/2015

«Siempre he Luchado por Vivir, Nunca por Morir»

Los Íberos. La Aristocracia del Pop Español

LOS ÍBEROS

Los Íberos es uno de los grupos fundamentales de la década de los sesenta en España, junto con Los Módulos, fueron las últimas grandes bandas de aquella época. Su material no fue muy abundante para el largo período que estuvieron activos (nueve sencillos y un LP en unos doce años), pero algunas de sus canciones se encuentran entre las imprescindibles de aquellos años. Aunque ya queda muy lejano, aún hay quien les recuerda por ser uno de los mejores en directo de entonces, alabado incluso por sus propios compañeros de profesión.

Si bien su actividad discográfica se inicia en 1968, Los Íberos como tal se fundaron en 1961 en Málaga con Enrique Lozano a la cabeza. En esos años el grupo sufrió muchos cambios en sus filas; de un inicial quinteto que contaba con saxofón y teclados, derivó a una definitiva en forma de cuarteto típico de banda de rock. De aquellas formaciones iniciales hasta  la que podríamos considerar la “clásica” de Los Íberos solo se mantuvo Enrique.

Enrique es un joven malagueño que conoció el ambiente de los más prestigiosos clubs de la emergente y cada vez más exclusiva Costa del Sol de principios de los años sesenta. Enrique fue barman en «El Mañana» y fue el propietario del local quien le trajo de los Estados Unidos su primera guitarra Gibson.

Siendo muy joven tocó en el circuito europeo de clubs de música en vivo. Durante su primera parada en Londres, aunque inicialmente iba a tocar a Liverpool, actuó en el Whisky a Go-Go. En los sótanos de ese local se encontraba el Flamingo, sala por donde discurrieron todos los grandes nombres imaginables del rock y el pop sesentero.

Con este recorrido y semejantes influencias, Enrique tenía muy claro la fórmula del éxito en el incipiente mundo del pop: cuatro músicos virtuosos en escena, gran calidad vocal, letras en inglés (aunque también en castellano), una cuidada imagen y un trabajo discográfico que solo grabado en Londres podría dar los resultados deseados, no en vano era la cuna del pop y desde donde se estaban lanzando los discos más importantes del momento.

Y los tres músicos que le acompañarían en esa aventura fueron: Adolfo Rodríguez (futuro miembro de los míticos «Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán»), natural de Ponferrada a la guitarra rítmica y voz, el también malagueño Diego Cascado a la batería y el almeriense Cristóbal de Haro al bajo.

En Torremolinos, empiezan a actuar en el Top Ten Club, versionando a grandes bandas de la época, como Beatles, Hollies, Small Faces o Manfred Mann. Llegan incluso a aparecer en Televisión Española en el célebre programa «Escala en Hi Fi». Con Emilio Santamaría (padre de la cantante Massiel) de manager, y gracias a estas apariciones, firman por la discográfica Columbia, y se van a grabar nada más y nada menos que a los estudios de la discográfica Decca en Londres.

En 1968 sale a la luz su primer sencillo, y sin duda, uno de sus mejores trabajos. En la cara A nos encontramos con «Summertime Girl», considerada entre las diez mejores canciones de los años sesenta en España. Arreglos orquestales, coros de voces perfectamente engranados en la melodía, sin duda una maravilla, que si hubiera estado firmada por cualquier grupo anglosajón formado en Londres o Los Ángeles, estaríamos hablando de un Nº 1 a escala mundial. La cara B no desmerece en nada a la cara A, «Hiding Behind my Smile», es otro tema cantado en inglés, pegadizo y alegre, que complementa perfectamente a «Summertime Girl». Un single monumental.

Summertime Girl (1968)

Hiding Behind my Smile (1968)

Este mismo año, sacan su segundo sencillo, esta vez con temas en castellano: «Las Tres de la Noche» / «Corto y Ancho». «Las Tres de la Noche» es una melancólica canción, casi a ritmo de vals, quizás uno de sus temas mas conocidos, con la misma calidad de arreglos que hicieron triunfar a «Summertime Girl». «Corto y Ancho» es un tema divertido, antítesis de la cara A, cuidado al máximo en el aspecto sonoro, como fue norma habitual en la discografía de Los Iberos.

Las Tres de Noche (1968)

Corto y Ancho (1968)

Llegamos a 1969, un año fundamental en la carrera de Los Iberos. Por una parte, realizan una gira con la cantante Massiel, siendo su grupo de acompañamiento, y por otro lado, intervienen en la película «Topical Spanish», dirigida por Ramón Masats. Pero también es importante, porque publican el primer y único Lp de su carrera.

El Lp llamado sencillamente «Los Iberos», grabado en Londres nada menos, contenía 12 temas, incluyendo los dos primeros singles del año anterior. El resto de temas saldrían desgranados en single durante ese mismo año y en 1970. Es sin duda uno de los dos o tres mejores discos grabados por un grupo español en toda la década de los sesenta.

En 1969 participan en la película de Iván Zulueta «1,2,3 al escondite inglés», interpretando «Hiding Behind my Smile». Es este año sale el sencillo «Nightime» / «Why Can’t We Be Friends», como vemos vuelven de nuevo al inglés. «Nightime», de corte melancólico, con una introducción de piano clásico que nos introduce en la canción que cuenta con unos arreglos prodigiosos, mientras que «Why Can’t We Be Friends» es una deliciosa canción, que bien pudieran haber firmado los Beatles o los Hollies.

Nightime (1969)

Este mismo año publican «Liar Liar» / «Mary Ann She», el primero popularizado por el grupo The Castaways, es una muy buena versión, cuyo punto fuerte es la combinación de sus magníficos coros con voces en falsete, mientras que «Mary Ann She», es una canción 100% bailable, con un ritmo mas popero que los trabajos anteriores.

Liar Liar (1969)

Entramos en 1970, tras un sencillo sin mucho éxito, «Te Alcanzaré» / «Amar en Silencio», llega otro single antológico, «Fantastic Girl» / «Back in Time». «Fantastic Girl», en la línea dejada por «Summertime Girl», es otra canción bailable, una joya, alegre, optimista, con voces corales en falsete que ponen los pelos de punta. «Back in Time» por su parte, es otro temazo, donde de nuevo, los coros complementan perfectamente la voz de Adolfo Rodríguez. Este sencillo, es junto a los dos primeros, la crema de la crema en la carrera de los Iberos.

Fantastic Girl (1970)

Back in Time (1970)

A continuación, y hasta 1973, Los Iberos publican un sencillo por año, ya con los grupos de rock progresivo en pleno auge, la popularidad de Los Iberos iba en caída libre. los Iberos cierran su carrera con un discreto sencillo: «María, Tobías y John» / «Bajo el Álamo». Con este tema hacen una incursión en el denominado «Flamenco Rock».

En definitiva, Los Íberos eran un grupo predestinado no solo para triunfar en nuestras listas, sino en el extranjero y porque no, en el difícil mercado anglosajón, pero por extrañas razones, no lograron su objetivo, a pesar de la calidad enorme de su trabajo y un nivel de producción y arreglos prácticamente nunca visto en España. Se les podía definir como la «aristocracia» del pop español.

Entrevista a Adolfo Rodríguez y Vídeos Inéditos de Los Íberos (2014)

Plácido Domingo y el Pop (Perhaps Love – 1981)

Ayer el gran tenor español Plácido Domingo cumplió 75 años, es una buena ocasión este aniversario para recordar su ingente y fecunda obra. La mayor parte de los análisis, como es lógico, se centran en su faceta operística y ultimamente como director de orquesta. Pero hay otro aspecto de su carrera musical que ha quedado un poco olvidado: sus fugaces acercamientos a la música pop; precisamente de su primera aproximación a este género trata esta entrada.

«Perhaps Love» es un álbum de 1981 grabado por Plácido Domingo. Lanzado por primera vez en Estados Unidos en septiembre de 1981, en 6 meses había alcanzado el estatus de disco de oro. Fue certificado como disco de platino al final de la década. El título de la canción que da nombre al álbum, es un dueto entre Domingo y John Denver. Este tema fue lanzado como single, alcanzando el puesto Nº 22 en los EE.UU. La canción vendió casi cuatro millones de copias. El álbum fue reeditado en CD en 1990 y de nuevo en 2008.

El productor del álbum, Milton Okun, animó a Domingo a probar suerte en la grabación de canciones pop. Domingo más tarde recordó: «Milton es la primera persona que creía que podía hacer ese tipo de música.»  El productor también sugirió la idea de que el tenor colaborara con el cantante de folk John Denver en la canción de mayor éxito del álbum, «Perhaps Love». Domingo y Okun hicieron  más grabaciones juntos, pero «Perhaps Love» ha sido el álbum más vendido del tenor dentro de la música pop.

Domingo considera que el éxito del álbum aumentó el número de sus fans y consiguió atraer más público a sus representaciones de ópera. Él dijo en 2008: «Como cantante de ópera, nunca se piensa en las listas de éxitos, pero sin lugar a dudas, este trabajo ayudó a mi posterior carrera».

Esta es una de las grabaciones menos reconocidas de Plácido Domingo, sin embargo es un trabajo hecho con una enorme brillantez creativa, dentro de una muy cuidada producción.

Las canciones no son piezas de ópera, pero se cantan casi como si lo fueran. La voz de Domingo se extiende a veces como un susurro, y así como desarrollando toda la potencia de su extraordinaria voz.

He Couldn’t Love You More

Sometimes a Day Goes By

Time After Time

Annie´s Song (John Denver a la Guitarra)

To Love

Perhaps Love (Dueto con John Denver)

Now While I Still Remember How

Yesterday

My Treasure

An American Hymn

Los Bravos (Hagamos una Navidad) 1970

Tras la marcha de Mike kennedy en 1969, se abría un periodo más que incierto para la continuidad de Los Bravos como grupo. Sustituido brevemente por el cantante inglés Bob Wright, la llegada posterior de Anthony «Andy» Anderson supuso el comienzo de la etapa más fructífera, musicalmente hablando, de la banda. Esto será objeto de una futura entrada sobre este periodo tan interesante, como desconocido, de la trayectoria de este gran grupo.

Cara a las navidades de 1970, Los Bravos editan un single con dos temas compuestos por su teclista Jesús Glück. La cara A es la canción que traigo a este espacio, un tema navideño donde se aprecia la madurez del grupo tanto instrumental como creativa.

ENLACE A LA CANCIÓN

Marisol & Mocedades (Happy Christmas) 1969

Con esta entrada, este espacio pretende recuperar una serie de canciones navideñas, fuera de los tradicionales villancicos, que son poco o nada conocidas por el gran público y creo merecen por distintas razones ser recordarlas.

Y nada mejor para este propósito que bucear en ese tesoro infinito que es el archivo de RTVE, donde encontramos joyas como esta.

Es difícil encontrar información precisa sobre esta actuación, pero podemos afirmar que se realizó en diciembre de 1969, dentro del mítico programa «Galas del Sábado», donde aparecen sus presentadores, Laura Valenzuela y Joaquín Prat, participando en dicha actuación.

Como información adicional, y con casi total seguridad, podemos añadir que este programa supuso la puesta de largo de Mocedades como grupo. Juan Carlos Calderón ya había tomado las riendas del mismo, evolucionando del inicial «Voces y Guitarras», primer nombre de la formación, a Mocedades, nombre con el que les rebautizó Calderón. Marisol ejercería de madrina del mismo durante el programa.

Enlace a la canción

Juan Carlos Calderón y el Jazz. Bloque 6 (1968)

Hoy, día 25 de noviembre de 2015, se cumplen 3 años del fallecimiento del extraordinario músico Juan Carlos Calderón. Digo extraordinario, porque lo fue en todas las facetas en las que desarrolló su carrera artística: compositor, arreglista, productor e interprete.

Siendo Calderón un personaje fundamental en la historia de la música popular española, es bastante desconocido para el gran público, que lo más que puede saber de el, son sus producciones con Mocedades o Sergio y Estíbaliz.

Sin embargo, siendo su trayectoria dentro del mundo del pop, con joyas como los arreglos que realizó en el álbum «Mediterráneo» de J.M. Serrat, muy interesante, a el lo que de verdad le gustaba era el jazz, fue su pasión toda su vida. Este es el objetivo de esta entrada, dar a conocer su faceta jazzística, desconocida, pero de una calidad y un talento enormes.

José Luis García, Juan Carlos Calderón, Tete Montoliu y Juan Claudio Cifuentes «Cifu» (1962). Vía cifujazz

Juan Carlos Calderón nace en Santander en 1938, desde muy temprana edad demuestra unas cualidades excepcionales para la música. Con ocho años ingresa en el conservatorio y siendo muy joven, crea su primer trío de Jazz, la «Santander New Orleans Band» con el que comienza a tocar. Al principio es sólo por diversión, estudia Derecho y es un modo de pasarlo bien los fines de semana haciendo lo que más le gusta, pero pronto se da cuenta de que su vida profesional no puede ser otra que la música.

A principios de los sesenta, viaja con frecuencia a Madrid para concluir su formación de piano clásico y proseguir su carrera musical. En esos años tiene volcada su atención principalmente en el Jazz. Es fácil verle tocar en conocidos clubs como el mítico Whisky Jazz de la calle Marqués de Villamagna, donde consigue un puesto de pianista estable, en inolvidables «jam sessions» con los mejores músicos del momento como Pedro Iturralde, Vladimiro Bas y José Nieto.

Stephane Grapelli, Pedro Iturralde, Juan Claudio Cifuentes «Cifu» y Juan Carlos Calderón. Whisky Jazz (1963). Vía cifujazz

En 1965 crea la «Jazztet» de Madrid con Pedro Iturralde, Jaime Pérez, Carlos Casasnovas, José Nieto, Lin Barto, Joe Moro, José Chenol y Vladimiro Bas. Todos ellos participan en sus discos y acompañarán a Juan Carlos en numerosos conciertos y festivales de Jazz de España y del resto de Europa.

En 1966 se produce la primera producción discográfica de Calderón. Se trata de un EP de cuatro canciones que graba con la gran vocalista Elia Fleta, con dos temas de propio Juan Carlos y un arreglo apoteósico del «Can´t Buy my Love» de The Beatles, obra también de el.

En 1968 se produce su debut en solitario con «Bloque 6», con tres temas propios y tres versiones. Estamos ante un disco fundamental para entender el jazz hecho en España, que además tuvo repercusión fuera de nuestras fronteras, como demuestra el premio al mejor disco extranjero del año obtenido en Estados Unidos. En 1996 fue reeditado en formato CD por la prestigiosa discográfica Blue Note.

Formando una Big Band de catorce músicos, basicamente el «Jazztet» mencionado anteriormente, Calderón hace unas versiones trepidantes de temas de M. Davis o T. Monk. Pero son sus propias composiciones lo que destaca en este álbum. La que de da nombre al propio disco, «Bloque 6», un tema que crea unas sonoridades muy peculiares y atractivas y «Sambando», un tema de fusión, de corte latino, con una fuerza increíble que te atrapa desde el principio.

Reseña publicada en La Vanguardia (24/08/1968)

Personal:

Juan Carlos Calderón (piano, arreglos y dirección)

Arturo Fornés, Joe Moro, José Luis Medrano, Juan Cano (trompeta)
José Chenoll, Jesus Pardo (trombón). Sigfrido Vidaurreta (trombón bajo)
Pedro Iturralde (saxo tenor y soprano, flauta)
Lincoln Barcelo (saxo tenor, flauta)
Vladimiro «Vlady» Bas (saxo alto, clarinete)
Lin Barto (saxo barítono, flauta)
Carlos Casasnovas (bajo)
Pepe Nieto (batería)

La obra de Juan Carlos Calderón es de tal magnitud, que no puede condensarse en una sola entrada, más adelante repasaremos su «Taller de Música» (1974 – 1976), y la que podemos considerar su obra maestra, «Soleá» (1978), una fusión de jazz y flamenco absolutamente irrepetible.

Milestones

Bad Feeling

Sambando

Stolen Moments

Straight No Chaser

Bloque 6

Fallece Gloria Van Aerssen (Vainica Doble) 22/10/2015

Gloria van Aerssen - Vainica doble

Ayer conocimos la triste noticia de la muerte de Gloria Van Aerssen, mitad superviviente del dúo Vainica Doble; la otra componente, Carmen Santonja,  murió en el año 2000.

Hablar de Vainica Doble es hablar de una explosión de creatividad, sensibilidad, una visión totalmente iconoclasta de la vida, de unas letras audaces y personales. Lo podemos considerar, sin exageración alguna, el grupo de culto por excelencia de la música popular española, que influenció y mucho a bandas de la «movida» y del «indie» español.

Con motivo de los últimos días de Gloria Van Aerssen, sus cuatro hijos le escribieron un emocionado y emocionante texto de despedida, que se reproduce en su integridad, nadie mejor que ellos para conocer y homenajear a esta gran mujer:

“Estos últimos días de espera, como todos los hermanos hacen cuando el final de su madre está cerca, hemos estado recordando.

De repente te ves de pequeño, llegando a casa del colegio, entrar corriendo en el salón, mamá y la tía Mari Carmen con sus guitarras o al piano, el maravilloso Stainway de cola herencia de la tía Albertina, las dos componiendo los temas del primer LP y contándonos la historia de una ballena azul, de una niña llamada Mari Luz… Y paraban para merendar con nosotros en la cocina, pan y mantequilla, leche o té.

Y luego las fiestas en casa con su pandilla de amigos tan divertidos, para nosotros como si fueran de la familia. Con el tiempo supimos que esa familia de amigos hacía cosas maravillosas en el cine, la pintura, la música, el baile.

Todo empezó cuando conoció a la tía Mari Carmen en una parada de autobús. Estaba silbando Tanhauser y nuestra madre se acercó y se unió a ella silbando una segunda voz, y a partir de ese momento se hicieron inseparables, y más adelante formarían Vainica Doble.

Por aquel entonces nuestra madre estudiaba Bellas Artes, entró muy joven en la escuela de San Fernando con trece o catorce años. También bailaba y salía de gira internacional con la compañía de Pilar López, de la que su hermano era primer bailarín. Dejó de bailar cuando conoció a nuestro padre, un hombre con un sentido del humor maravilloso, muy divertido y pintor de gran talento.

A nuestra madre le gustaban muchas cosas que siempre compartía con nosotros. Veíamos películas de los hermanos Marx, de Lubitch, o de Billy Wilder; hacíamos tartas y galletas, nos enseñaba a Fra Angélico, Mantegna o Vermeer. Nos contagió su amor por los libros y siempre había cerca alguno de Conrad, Tolstoi o Galdós. Por supuesto la música fue su gran pasión, Bach, Schumann, Brahms, Falla, Stravinsky, los Rolling, Beatles, Traffic, Who…

Todo este batiburrillo, toda esta mezcla parecía y era natural. Nos enseñó a mirar y a escuchar con atención, a descubrir lo maravilloso en lo cotidiano, a rodearnos de belleza.

No le importaba que anduviésemos pisando charcos y llegáramos a casa llenos de barro. Todo este amor por las artes y las cosas bonitas de la vida nos las transmitió, y nosotros a nuestros hijos, sus queridos nietos, Clara, María, Juan, Paloma, Lola, Gonzalo e Ignacio.

Hemos aprendido que la música, la pintura, el cine, etc. te ayudan a disfrutar los buenos momentos y superar los malos. Nos ayudarán ahora a decir adiós a las meriendas, a los paseos, a las partidas de gin rummy, a los gin tónics, a las conversaciones disparatadas.

Siempre nos dijo que quería morir comida por un oso polar, tal y como hacían los esquimales en Los dientes del diablo. No hemos conseguido encontrar un oso, pero sí un hospital en medio de un bosque en Cercedilla, donde ha sido tratada con mucho cariño, y la han ayudado a morir sin sufrimiento.

‘…..era una noche obscura y tormentosa….’”

Ignacio, Laura, Álvaro y Diego de Cárdenas Van Aerssen-Beyeren.

Vainica Doble (Caramelo de Limón) 1971

Los Módulos

El pasado día 11 de octubre falleció a los 69 años de edad Juan Antonio García Reyzábal, batería y violinista del grupo Los Módulos, este triste acontecimiento me da la oportunidad de realizar una semblanza de este mítico grupo, reivindicar su legado y que sirva de homenaje póstumo a este gran músico que se nos ha ido.

Los Módulos, quizás el último gran grupo surgido en España al final de la década de los sesenta junto con Los Iberos, tuvo su origen en 1968, cuando el guitarrista y vocalista Pepe Robles, que había sido bajista en otra banda, Los Ángeles, recibe la oferta del productor Rafael Trabucchelli para grabar en solitario. Robles, sin embargo, prefiere dar forma a un grupo, el productor acepta y de este modo nace Módulos, una formación orientada hacia el rock progresivo y sinfónico con ribetes pop, que vivirá su momento de mayor popularidad en 1970 con su primer disco, “Realidad”, y con la canción de Reyzábal y Robles «Todo Tiene su Fin».

Rafael Trabuchelli, productor estrella de Hispavox, apuesta desde el primer momento por el proyecto y proporciona un local de ensayo en los sótanos del mismo edificio Hispavox. Para febrero de 1969, Los Módulos comienzan sus maratonianos ensayos (hasta ocho horas diarias), conformado como un cuarteto con Tomás Bohórquez (órgano Hammond y piano), Emilio Bueno (bajo), Juan Antonio García Reyzábal (batería y violín eléctrico) y el propio Pepe Robles (guitarra y voz).

Poco antes del verano de 1969 aparece su primer single «Ya no me Quieres», con letra de Reyzábal y música de Robles. El disco se vende bastante bien y está varias semanas en las listas de los más vendidos. A raíz de este éxito, Hispavox les firma un contrato por cuatro LPs en cuatro años consecutivos.

Tras el verano se meten en el estudio de grabación para lo que será su primer larga duración. En una las últimas sesiones de grabación, Reyzábal aparece con ocho compases de una melodía. Trabuchelli les apremia a terminar el trabajo, ya que el LP queda algo corto de minutaje y el grupo desarrolla rápidamente aquel apunte melódico. De ahí surgirá su tema estrella, con el que serán recordados para siempre, «Todo Tiene su Fin».

Hispavox aprovecha el momento cumbre del single para lanzar en 1970 «Realidad», un excelente trabajo que incluye siete temas propios y dos versiones de Los Beatles.

En 1971 se edita el LP «Variaciones» en la línea del anterior, con instrumentaciones parecidas aunque con menos frescura. Este disco contiene una joya: “Solo tú”, que será editada en single. Dicha canción vuelve a colocar a Módulos arriba en las listas y propicia para el grupo un segundo verano cargado de galas por toda España.

En los primeros meses de 1972 graban el LP «Plenitud». Aquí surgen las primeras discrepancias con la discográfica, cuando el grupo quiere aproximar su música a las grandes bandas de Rock Progresivo de la época (Yes, King Crimson, Genesis), pero la compañía quiere continuar con lo hecho hasta entonces primando la comercialidad. El LP, un tanto incomprendido, se vende poco; sin embargo, el single «No Quiero Pensar en ese Amor» escala los primeros puestos de las listas y está entre los más vendidos de aquel verano.

A partir de 1973 empieza la decadencia del grupo. En un accidente de tráfico, Robles está a punto de morir y su recuperación se prolonga durante meses; esto supone un parón para el grupo, que cuando tienen que grabar su 4º LP, por obligación contractual con Hispavox, resulta su trabajo más flojo, derivando a un Pop más ligero, lejos de los desarrollos instrumentales del pasado. El disco es un fracaso y será el último larga duración hasta que graben en 1978 «Módulos», un disco autoproducido por ellos, quizás el más personal, que no tuvo la acogida que se merecía.

De todas formas hubo cambio de integrantes entre medias, en 1974 se marcha Juan Reyzábal y en 1976 lo hace el bajista Emilio Bueno. En 1979 se produce la disolución del grupo.

¿Qué queda de Los Módulos a día de hoy?, el recuerdo de su gran éxito «Todo Tiene su Fin», y un total olvido del resto de su fructífera carrera, la cual modestamente he querido recordar y homenajear.

Todo Tiene su Fin (1969)

Solo Tu (1971)

Tú Eres tu Mundo (1974)

Perdido en mis recuerdos (1975)

María del Mar Bonet (L’Águila Negra) 1981

María del Mar Bonet i Verdaguer (Palma de Mallorca, 27 de abril de 1947), es una cantante y compositora española en lengua catalana, con una larga trayectoria de investigación en las músicas populares de las islas Baleares, Cataluña, y de todo el entorno mediterráneo.

Estudió cerámica en la escuela palmesana de artes y oficios y en la Massana, pero acabó dedicándose a la canción. Trasladándose en el año 1967 a Barcelona; en sus comienzos fue miembro de Els Setze Jutges y colaboradora de El Grup de Folk, dos formas diferentes de entender la música. Así, María del Mar dejaba claro un rasgo que le acompaña hasta hoy: su independencia. Ha flirteado con el rock, el jazz, la balada… pero su eterno amor es el folklore mallorquín, y por extensión el del mediterráneo. Mujer de sólida coherencia, que pone al día la música popular sin necesidad de electrificarla o hacer concesiones a la moda, ha ganado profundidad en su voz e interpretación con el paso del tiempo. Cantando siempre en catalán, ha actuado con éxito por casi todo el mundo.

Su primer LP, sin título específico, se editó en 1970. En él incorporó algunos temas grabados anteriormente; otros nuevos extraídos del cancionero popular, y varias canciones creadas por ella misma, como «Dóna’m sa mà», una bellísima canción de amor.

Por esas mismas fechas, María del Mar entró en contacto con el productor Alain Milhaud, que le aconsejó cambiar de sello discográfico; el cambio se concretó y firmó con el sello Bocaccio Records, creado por Oriol Regàs, empresario y promotor cultural, uno de los máximos representantes de lo que se denominó la “Gauche Divine”, movimiento de intelectuales y artistas de izquierda que se extendió por la Barcelona de los años sesenta y comienzos de los setenta

En Bocaccio, con Milhaud como productor, grabó la canción «L’águila negra», bellísima canción de la que era autora la cantante francesa Barbara, donde el citado Milhaud hace una producción exquisita del tema, apoyado en los arreglos de Jacques Denjean.

Cuenta Alain Milhaud que, tras el sorprendente éxito que tuvo aquella canción, la división francesa de la discográfica CBS quiso editar y hacer una gran promoción de la canción «L’àguila negra» cantada por María del Mar en francés, lo que significaba una gran oportunidad para su proyección artística; oportunidad que ella rechazó, manteniendo su postura, en aquel momento claramente ideológica y siempre inalterable, de no cantar más que en catalán; postura que María del Mar siempre ha mantenido con una extraordinaria coherencia personal.

En el sello Bocaccio Maria del Mar editó también su segundo LP en el que además de algunos temas propios y otros populares, incluyó cinco canciones basadas en textos de grandes poetas. En 1974, Maria del Mar decidió rescindir su contrato con Bocaccio.

Originalmente «L’àguila negra» se editó solo en formato single en 1971. En 1981 se reeditó el álbum anteriormente citado añadiendo está canción, que dio título a ese disco, posteriormente se editaría en formato CD en 1991.

L´Águila Negra (enlace a la canción)

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SOLERA (1973)

Esta es la historia de una de las sagas más fecundas de la música popular española, dos discos, dos formaciones, pero un nexo común, una continuidad; una colección de canciones irrepetibles, que no han envejecido en absoluto, porque lo bueno nunca envejece.

El grupo Solera es el primer eslabón de esta cadena, que tendría continuidad un año después con Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán (CRAG); dos discos míticos, dos grupos de culto, leyenda viva de la música española.

En 1972 dos hermanos, José Antonio y Manuel Martín, crean un dúo con el nombre de José y Manuel, con una orientación basicamente folk, a ellos se unen dos músicos extraordinarios, Rodrigo García y José María Guzmán.

Rodrigo, sevillano de nacimiento, emigró a Colombia siendo un niño y a mediados de los sesenta, formó parte de la banda «los speakers», algún día habrá que reivindicar el Pop-Rock que se hizo en Iberoamérica en aquella época; de vuelta a España, forma parte de Los Pekenikes en 1971 y participa como músico de sesión en las grabaciones de la época, es un magnífico guitarrista.

José María Guzmán, muy influenciado por el pop británico, es en aquella época un bajista prestigioso, que como Rodrigo, también es un demandado músico de sesión.

Y así surge Solera, y su disco homónimo, un álbum variado, con unas armonías perfectas, trufado de muchas influencias, con un sonido cercano al de la Costa Oeste de Estados Unidos, la calidad de las canciones es enorme y con esa materia prima, Rafael Trabucchelli, productor del disco, dota de una orquestación a los temas que  los envuelve, pero no quedan nunca ahogados en ella.

El disco tuvo muy buenas críticas, pero escasas ventas, falta de promoción sobretodo. Dentro del grupo empezaron las diferencias creativas que llevaron a su disolución. Posteriormente Rodrigo y Guzmán se integrarían en CRAG, pero ese fue el siguiente capítulo de esta historia.